Francisco Villalba, el ex ‘para’ que denunció una presunta conexión entre el presidente y las AUC fue ultimado por sicarios en la casa donde purgaba su detención domiciliaria.

El homicidio ocurrió este 23 de abril en el municipio de La Estrella, sur del área metroplitana, en la vivienda donde se encontraba bajo detención domiciliaria, al parecer concedida por problemas de salud.

El año pasado, Villalba, aseguró que el presidente Álvaro Uribe Vélez había tenido que ver con la Masacre del Aro, semanas después, se retractó: “Quiero pedirle perdón a usted, por haber mancillado su nombre y ponerlo en la palestra pública”, dijo Francisco Villalba Hernández en una carta que llegó a la Casa de Nariño desde el patio de Alta Seguridad de la cárcel Modelo de Bogotá, donde estaba recluido hace 10 años.

En esa oportunidad, Villalba acudió a la Fiscalía para contar lo que sabía de El Aro. Pero los datos y fechas que aportó no concordaban, al punto que cuando la Fiscalía le remitió su versión a la Corte, esta la desechó por considerar, primero, que no tenía competencia y, sobre todo, por dudas de credibilidad.

Aunque admitió después que había intentado salpicar al Gobierno, Villalba no explicó claramente cuáles fueron las razones de esa jugada ni las que lo llevaron a retractarse después. Sus afirmaciones en el caso de El Aro y del asesinato del periodista Jaime Garzón fueron enviados a varios expedientes e incluso estuvo en la Comisión de Acusación de la Cámara declarando sobre el presidente Uribe.

El asesinato de Villalba ocurre tan solo sólo dos semanas después de que el ex paramilitar fuera beneficiado con la casa por cárcel. Según testigos, el desmovilizado fue abordado por sicarios que le dispararon en reiteradas oportunidades.

Después del atentado Villalba fue trasladado al hospital del municipio de La Estrella aún con vida, pero falleció horas después a causa de los impactos.

Entre otros delitos cometidos durante su militancia en las AUC, Villalba estaba condenado a 33 años de cárcel por la masacre de 15 personas en El Aro (Antioquia), en 1997. En esa fecha cerca de 200 miembros de las ACCU, incursionaron en a inspección de policía El Aro, y tras sacar por la fuerza a los pobladores de sus viviendas, iniciaron su accionar asesinando a once personas. Después de permanecer durante cinco días en la población, teniéndola prácticamente tomada, ejecutaron, en presencia de los habitantes, a un trabajador del municipio y aun comerciante.

Foto de apertura: fotograma tomado de video de Noticias UNO.