Insólito ha sido el desarrollo de la versión libre del jefe paramilitar Luis Eduardo Zuluaga, alias ‘Macguiver’. Después de años de sometimiento y accionar criminal en corregimientos de Antioquia, el desmovilizado afirma haber realizado obras de beneficencia con recursos de las autodefensas. Pero también confesó varios crimenes que permanecían impunes en el Magdalena Medio.
Luis Eduardo Zuluaga nació el 7 de abril del 1969 en San Francisco, Antioquia. Allí estudió hasta quinto de primaria.
Luis Eduardo Zuluaga, ex comandante del frente José Luis Zuluaga. Foto: Fiscalía – Autodefensas Campesinas del Magdalena Medio |
Para ese entonces la presión de la guerrilla del Eln en el pueblo lo obligó a desplazarse a la zona urbana del municipio de San Francisco, Antioquia, en compañía de su hermano José Luis, quien fue el primero en comentarle sobre la existencia de las Autodefensas Campesinas del Magdalena Medio (ACMM).
La muerte de su hermano a manos de guerrilleros del ELN, hicieron que, con 19 años, se presentara ante el jefe paramilitar Ramón Isaza en 1988 para enlistarse en su grupo de autodefensas del Magdalena Medio. Isaza decidió enviarlo con Henry Pérez quien lo mandó a una de las escuelas ‘paras’ que crearon en la región. Desde entonces fue conocido con el alias de ‘Macguiver’.
En ese entonces las Autodefensas del Magdalena Medio era un movimiento que se manejaba con criterio familiar, por este motivo muy pronto ‘Macguiver’ se ganó la confianza de sus jefes al casarse con una de las hijas de Ramón Isaza, fundador de este grupo, quien lo convirtió en unos de sus hombres de confianza.
Para comienzos del 2000 ‘Macguiver’ asumió la comandancia del frente Jose Luis Zuluaga, el cual bautizó en honor a su hermano asesinado por el Eln.
Seis años después, el 7 de febrero del 2006, Ramón Isaza se acogió al proceso de Justicia y Paz; Macguiver se desmovilizó pero estuvo prófugo de la justicia hasta el 19 de diciembre del 2007 cuando se entregó a las autoridades, en Sonsón.
A sus 39 años de edad, el jefe paramilitar continuó su versión libre ante la Fiscalía, en donde, antes que confesar sus crímenes, empezó a enumerar las obras que las Autodefensas realizaron bajo su mando.
‘Macguiver’ construyó más de 80 kilómetros de carretera en diferentes veredas y corregimientos de Antioquia, además de millonarias edificaciones. Verdad Abierta tuvo acceso a algunas de las obras de “beneficencia” supuestamente realizadas por el paramilitar que actualmente se encuentran bajo el estudio del despacho segundo de la Unidad de Justicia y Paz de la Fiscalía. Los documentos reposan en una carpeta llamada “Proyectos de Obras Sociales” que entregó el mismo paramilitar durante su primera versión libre el pasado 6 de octubre.
Los proyectos comprenden la construcción de 18 kilómetros de carretera en la Danta, Antioquia en las veredas de Playa Linda y Playa Hermosa; 7 kilómetros entre la vereda La Hermosa y Aquitama; 10 kilómetros entre la vereda El Remanso y Piedras Blancas; 11 kilómetros de carretera entre La Mesa y San Rafael; 38 kilómetros entre Mulato Bajo y Guadualito; 6 kilómetros entre las veredas de San Antonio y Caño Seco y 13 kilómetros de la autopista Medellín-Bogotá desde la vereda La Mañosa hasta el municipio de San Francisco.
‘Macguiver’ también dijo haber realizado obras de infraestructura entra las que sobresalen un conjunto de viviendas de interés social, un hospital y una plaza de toros en el corregimiento de La Danta, Antioquia. Según sus propias palabras el frente tenía dos retroexcavadoras y un buldózer que eran utilizados para construir sus proyectos.
En la versión, confesó que empresas como Cementos Diamante, Cementos Samper y Río Claro presuntamente fueron obligadas a donar material para la construcción de dichas obras. Los camiones eran interceptados en la carretera y posteriormente trasladados a la obra donde descargaban el material.
El “carácter social” del Frente José José Luis Zuluaga contrasta con el testimonio de las más de 7.245 víctimas registradas de las Autodefensas Campesinas del Magdalena Medio, quienes sufrieron en carne propia crímenes de extorsión, desaparición, homicidios, reclutamiento ilegal y ‘limpieza social’ atribuídos al paramilitar.
Dice haber infiltrado a las guerrillas hasta tal punto que más de la mitad de su ejercito llegó a estar conformado por ex militantes del Eln.
‘Macguiver’ ha confesado 51 homicidios entre los años 1999 y 2005 en San Luis y San Francisco, Antioquia. La última decisión judicial proferida en su contra fue adoptada en abril pasado por un fiscal de Derechos Humanos y Derecho Internacional Humanitario que lo investiga por el secuestro y homicidio de las hermanas Lucila y Liliana González Cardona.
Los hechos se presentaron el 26 de noviembre de 2002, cuando hombres bajo su mando secuestraron a las dos hermanas, menores de edad, a las cinco de la mañana de un hogar juvenil de Argelia, Antioquia. Las mujeres fueron asesinadas en el campo de fútbol de esa población.
El jefe paramilitar también reconoció haber participado en el reclutamiento de menores y el entrenamiento en actividades ilícitas. Su frente se financió principalmente del robo de combustible, la prestación de servicios de seguridad a mineros y la extorsión de comerciantes, cantineros y dueños de fincas.
Su nombre fue recordado hace algunos meses, tras la captura del ex director de fiscalías de Medellín y hermano del ministro del Interior y de Justicia, Guillermo León Valencia Cossio, pues durante su gestión, un proceso contra Zuluaga fue archivado y hace parte de al menos ocho investigaciones que son revisadas por una comisión especial de la Fiscalía.
‘Macgiver’ era señalado de ordenar la tortura y asesinato de Luz Adiela Quintero Ramírez y Eugenio Antonio Hernández, ocurridos el 26 de agosto del 2002, en la vereda Mata de Guadua en Argelia, Antioquia. En diciembre de 2006, un fiscal de Medellín aseguró que no existían pruebas contra el paramilitar por lo que salió del centro de reclusión de La Ceja, Antioquia.
El narcotráfico no fue untema ajeno al frente José Luis Zuluaga, aún cuando ‘Macguiver’ afirmó estar en contar de los cultivos ilícitos aceptó haber impuesto una vacuna a los narcotraficantes para financiarse.
En su segunda versión libre el jefe paramilitar ofreció a la Fiscalía muebles, inmuebles, ganado y derechos de mejoras en viviendas avaluadas por 2.213 millones de pesos. Los bienes se encuentran bajo el estudio de la Fiscalía para poder ser entregados al Fondo de Reparación.
El jefe paramilitar dice estar interesado en devolver a las víctimas los terrenos robados. Asegura que a muchas de las casas y fincas invadidas les hizo “mejoras”. Muchos de los afectados no han regresado a sus tierras por temor después de lo sucedido. Algunas de las víctimas entrevistadas por Verdad Abierta aseguran que en la zona aun permanecen grupos paramilitares.