Carranza provocó la guerra entre Llanos y Arroyave: ‘Don Mario’

      
El ex paramilitar dijo que el zar de las esmeraldas provocó el conflicto entre ‘Buitragueños’ y ‘Urabeños’. Detalló además cómo se financiaba el Bloque Centauros.
En breve: En su versión libre del 7 de noviembre Daniel Rendón Herrera, alias ‘Don Mario’, dijo que Víctor Carranza provocó el conflicto entre Miguel Arroyave y Héctor Germán Buitrago, alias ‘Martín Llanos’. Detalló cómo se financiaba el Bloque Centauros.

Nombres de paramilitares mencionados: Miguel Arroyave, ‘Martín Llanos’, ‘Guillermo Torres’.

Lugares mencionados en la versión libre: Hato Corozal, Guaviare, Meta, Casanare.

altAunque nunca ha sido condenado Víctor Carranza ha estado en la mira de la justicia por sus vínculos con los ‘paras’.
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El responsable de la guerra entre los ex jefes paramilitares Héctor Germán Buitrago, alias ‘Martín Llanos’ y los ‘Urabeños’ de Miguel Arroyave, alias ‘Arcángel’,que dejó más de mil muertos entre combatientes y civiles, fue el zar de las esmeraldas Víctor Carranza.

Así lo aseguró en su última versión libre ante un fiscal de Justicia y Paz de la Fiscalía, Daniel Rendón Herrera, alias ‘Don Mario’. El ex paramilitar afirmó que Carranza sembró cizaña entre los dos ex jefes paramilitares, diciéndole a cada uno que el otro lo quería matar. “Carranza habló con Miguel (Arroyave) sobre Martín (Llanos), y ahí me di cuenta de que Miguel se dejó utilizar, para indisponerlo con Martín. Pienso que hizo lo mismo con Martín”.

‘Don Mario’ no especificó las razones que empujaron a Carranza a provocar la guerra, pero afirmó que el zar de las esmeraldas siempre ha tenido intereses enlos Llanos y a finales de los ochenta conformó un grupo paramilitar en la región: ‘Los Carranceros’. Según ‘Don Mario’ este grupo se convirtió en las Autodefensas del Meta y Vichada y Carranza le entregó el mando a José Baldomero Linares, alias ‘Guillermo Torres’. Aunque la filiación entre ‘Carranceros’ y Víctor Carranza parece evidente, el zar de las esmeraldas siempre lo ha negado y la justicia no lo ha podido comprabar.

Los ‘Buitragueños’ y los ‘Urabeños’, como llamaban a los integrantes del Bloque Centauros por haber sido enviados por los hermanos Castaño desde el Urabá, sostuvieron una guerra entre 2003 y 2004 por el dominio del sur del Casanare y, según las autoridades, por el control de rutas y cultivos de coca. Esta guerra dejó alrededor de 1.000 muertos en ambos grupos, además de civiles inoncentes.

Este ha sido el peor enfrentamiento entre dos bandos paramilitares.

La financiación del Bloque Centauros
En su versión libre ‘Don Mario’ también detalló cómo fue la financiación del Bloque Centauros, del que él fue jefe financiero entre 2000 y 2004. El ex paramilitar estableció que tenían dos tipos de ingresos. Por un lado lo que el llamó las fuentes “lícitas”, en realidad extorsiones a empresarios del Meta, Guaviare y Casanare y, por el otro, los dineros que recibían del narcotráfico.

El gremio de los ganaderos fue uno de los principales aportantes del Bloque Centauros. Según ‘Don Mario’, acordaron en una reunión que los ganaderos les pagarían un “impuesto” del dos por ciento anual sobre el valor total de sus reses. Cada animal fue avaluado en un millón de pesos. A pesar de que los ganaderos no fueron amenazados, ‘Don Mario’ aseguró que “podían sentir temor por las armas, pero siempre se llegaba a un acuerdo”.

‘Don Mario’ calculó que en la zona donde el Bloque Centauros delinquía, pastaban alrededor deun millón de cabezas de ganado. Por lo que las autodefensas percibían aproximadamente 20.000 millones de pesos anuales en extorsiones a los ganaderos.

Otro sector que también fue extorsionado por las Auc, fue el de los contratistas de obras públicas. Con ellos, los paramilitares acordaron que debían pagarles el cinco por ciento del total de los contratos.

Si no pagaban, corrían el riesgo de que sus materiales fueran robados y sus trabajadores intimidados. ‘Don Mario’ contó el caso de una multinacional que construía un puente sobre el río Guaviare y que se negó a darles el dinero. Además le exigieron 2.000 pesos por bulto de cemento, pero como la compañía se negó a pagar la extorsión, los ‘paras’ les robaron ocho tractomulas y les pidieron dinero a los chóferes. “Al final llegó el dinero” dijo ‘Don Mario’.

‘Don Mario’ también dijo que las petroleras de Casanare y del Meta les donaban combustibley dinero en efectivo. Confesó que una vez fue a las oficinas de una de las empresas en Hato Corozal, Casanare. Aunque no recordó el nombre de la empresa, acordaron que le girarían a las Autodefensas 20 millones de pesos y 25 tambores de gasolina por mes.

Los ‘paras’ también les cobraron un “impuesto” a los grandes agricultores como palmicultores y arroceros. Con ellos se estbaleció que debáin entregar 20.000 pesos por hectárea. Aunque ‘Don Mario’ no se acordó cuantas agricultores fueron extorsionados, según un informe de 2009 de Fedearroz, en los Llanos Orientales hay alrededor de 180 mil hectáreas de arroz, la mayoría en el Meta y en Casanare. Lo que quiere decir que’Don Mario’ podía recoger hasta 3.600 millones gracias a las extorsiones a arroceros.

El Bloque Centauros también cobró cinco mil pesos por cada canasta de cerveza y caja de aguardiente que se comercializara en la zona. Los ‘paras’ recogían el dinero en las comercializadoras de las ciudades o en los camiones que llevaban el licor a las zonas rurales. Algunos ‘paras’ se dedicaban a controlar cuánto se vendía para extorsionar a los comerciantes. A cambio les dejaban recibos con el logo del Bloque Centauros.

Las gasolineras en el Meta, Guaviare y Casanare les pagaban 25 pesos por galón a los ‘paras’. En 2004, cuando ‘Don Mario’ dejó la región, la las estaciones de servicio pagaban hasta 50 pesos por galón. Los paramilitares controlaban el número de carrotanques que llegaban a las bombas y así le cobraban a los dueños.

El Bloque Centauros extorsionaba además a comerciantes, transportadores y compañías de buses intermunicipales en la zona que controlaban. Paralelamente a las extorsiones ‘Don Mario’ admitió que sus ingresos venían del narcotráfico.

Aclaró que las autodefensas nunca tuvieron cultivos de coca, laboratorios de procesamiento o medios para transportar la droga, pero aceptó que cobraban en todas las etapas de la producción del narcótico.

La tarifa por cada kilo de cocaína que salía de los laboratorios o ‘cocinas’ era de 80.000 pesos. Pero los ‘paras’ cobraban 400.000 por kilo a los comisionista o ‘chichipatos’, como se les llama en la jerga criminal a las personas que compran la droga a los productores por cuenta de un narcotraficante que después la envía al exterior. Los productores que venían de zonas guerrilleras con ‘coca’ tenían que pagar 500.000 pesos por kilo. En la época en la que ‘Don Mario’ delinquió en los Llanos, un kilo de cocaína llegó a valer casi cuatro millones de pesos.

‘Don Mario’ dijo que un laboratorio producía entre 500 y mil kilos por semana y que en 2003 las autodefensas protegían por lo menos cuatro ‘cocinas’ en la región. Quiere decir que por semana podían recibir entre 160 y 320 millones de pesos por cocina.

Así mismo los productores de perganmanato y amoniaco, insumos para procesar la hoja de coca en cocaína les pagaban por kilo o por galón producido a las autodefensas.

Aunque los paramilitares tenían miles de millones de pesos de ingresos mensuales, ‘Don Mario’ dijo que “el dinero cómo entraba se iba”. Declaró que los gastos en nómina alcanzaban mil o dos mil millones de pesos mensuales. Recordó que en plena guerra con los ‘Buitragueños’ llegó a desembolsar 14 mil millones de pesos en un mes y que en un día de combates sus hombres llegaron a utilizar 100 mil tiros, que avaluó en cuatro mil pesos cada uno, es decir gastaron 400 millones de pesos en balas en un sólo día.

Estas millonarias sumas eran manejadas en efectivo y se escondían en ‘caletas’ en fincas del grupo bajo la vigilancia de ‘Don Mario’.

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