La utilización de minas antipersona por parte de los grupos armados al margen de la ley se ha convertido en una de las estrategias que ha cobrado más víctimas dentro del conflicto interno colombiano. Estos casos reportados como eventos con minas antipersona o de munición sin explotar, se distribuyen en accidentes o incidentes de acuerdo a la intención del actor armado que manipula el artefacto explosivo. Los accidentes se refieren a eventos indeseados y los incidentes a eventos que tienen la intención de causar un perjuicio. Según las estadísticas, en Colombia se presenta en promedio por lo menos un evento diario con artefactos explosivos sea de tipo accidente o incidente.
La mayor afectación de los eventos con Map y Muse se concentra en las zonas rurales de los departamentos de Antioquia, Meta, Caquetá, Bolívar y Arauca, lugares donde las víctimas generalmente corresponden a miembros de las poblaciones más vulnerables que se localizan en zonas de conflicto: indígenas, comunidades afro y campesinos.