En la frontera colombo-venezolana, cientos de mujeres subsisten gracias al trabajo que supone ingresar y sacar mercancía por las peligrosas trochas que unen a los dos países y que hoy son objeto de disputa entre grupos armados ilegales. Sus vidas están en riesgo.
En la frontera colombo-venezolana, cientos de mujeres subsisten gracias al trabajo que supone ingresar y sacar mercancía por las peligrosas trochas que unen a los dos países y que hoy son objeto de disputa entre grupos armados ilegales. Sus vidas están en riesgo.