Cinco meses antes de que se firmara el Acuerdo de Paz con las Farc, en Guaviare uno de sus frentes más antiguos decidió no dejar las armas y tiempo después, otro le dio la espalda. Además, sucesores del paramilitarismo, acechan sus tierras. Sus habitantes padecen el yugo de unos y otros, y el miedo no los deja hablar.