Óscar Suárez: el cacique que se alió con los ‘paras’

      
Andanzas de un hombre que pasó de conductor de servicio público a ser el Senador más votado en Antioquia. No sólo se le condenó por nexos con paramilitares, también se le investiga por ‘bacrimpolìtica’.

oscar suarez mira ppÓscar Suárez Mira, exsenador de la República.

La reciente condena a nueve años de prisión proferida por la Corte Suprema de Justicia contra Óscar Suárez Mira, por el delito de concierto para delinquir, dados sus nexos con jefes paramilitares, abre el interrogante si éste será el principio del fin de la hegemonía que le ha permitido al líder político del Partido Conservador manejar todos los hilos del poder del municipio de Bello en los últimos doce años. Descargue la sentencia a Óscar Suárez Mira

Pero no solo eso: la pregunta que muchos ciudadanos de esta localidad del norte del Valle de Aburrá se formulan es si está decisión permitirá poner fin al matrimonio entre legalidad e ilegalidad que ha reinado los últimos años en Bello, la segunda ciudad más poblada de Antioquia después de su capital.

No se trata de un asunto de poca monta. En Bello, como en el resto del departamento, hablar de Óscar Suárez Mira es referirse al hombre que construyó un imperio político inexpugnable capaz de doblegar a cuanto contendiente electoral se le atravesara. Su hoja de vida muestra que fue conductor de bus de servicio público, inquieto líder deportivo, Alcalde (1995-1997), Representante a la Cámara (2002-2006) y Senador (2006-2009).

Sus logros siempre han estado cubiertos por un manto oscuro, dadas sus supuestas alianzas con grupos criminales al servicio del paramilitarismo, las cuales fueron confirmadas por la Corte en su decisión. En ella, el alto tribunal valoró las declaraciones del jefe paramilitar Fredy Rendón Herrera, alias ‘El Alemán’, quien dijo ante fiscales de Justicia y Paz en 2009, que Suárez Mira fue uno de los 23 políticos que recibieron el apoyo, tanto económico como electoral, del Bloque Elmer Cárdenas de las Autodefensas para la campaña al Congreso en 2006, justamente cuando obtuvo una de las votaciones más altas en Antioquia y una de las más representativas en el país.

En estos comicios, realizados el 12 de marzo de 2006, Suárez fue avalado por el movimiento Alas Equipo Colombia, liderado por Luis Alfredo Ramos Botero, exalcalde de Medellín, excongresista y exgobernador de Antioquia. En esas elecciones,  obtuvo 71 mil 212 votos, de los cuales unos 65 mil 496 sufragios los cosechó en Antioquia, mayoritariamente en el Urabá antioqueño, convirtiéndose en el mayor elector del  departamento.

La condena también parece confirmar lo advertido años atrás por organizaciones no gubernamentales como Corporación Nuevo Arco Iris (CNA), Votebien.com e Instituto Popular de Capacitación (IPC), las cuales planteaban serios interrogantes sobre la legitimidad (y legalidad) del líder político mucho antes que de este fuera un huésped permanente del pabellón de parapolíticos de la cárcel La Picota.

Varios de esos informes coinciden en señalar que en Bello, Óscar Suárez logró construir un complejo entramado político en donde se borraron las fronteras entre lo ilegal y lo legal. Su hermana heredó el proyecto político familiar y le siguió sus pasos: primero fue alcaldesa (2004-2007) y, luego, sin mayor experiencia política a nivel nacional, obtuvo una curul en el Senado de la República para el periodo 2010-2014, alcanzando 112.475 votos en las elecciones del 14 de marzo de 2010,  la mayor votación del partido Conservador en el país.

La relación legalidad e ilegalidad
Pero, ¿cómo llegó Óscar Suárez a construir semejante poder político, de la mano de la ilegalidad? Un informe realizado por la Corporación Nueva Arco Iris (CNA) en 2010, arroja luces al respecto. Allí se narra cómo Suárez, siendo conductor de bus de la empresa Bellanita de Transportes, de propiedad de Hugo Albeiro Quintero (quien fue procesado y condenado por sus nexos con grupos armados organizados ilegales), comenzó a destacarse como un aguerrido vocero de las causas de los trabajadores del sector transportador. De ahí que muchos lo recuerden en sus inicios como un hombre más cercano a la izquierda.

A ello se sumó su capacidad para organizar torneos deportivos interbarriales y municipales, lo que le valió la admiración de decenas de grupos juveniles que comenzaron a gestarse en Bello a principios de la década de los noventa, los cuales vieron en Óscar Suárez a un gran aliado. Fueron precisamente estos movimientos quienes apoyaron su primera candidatura a la Alcaldía de Bello, la cual perdió.

“Pero Suárez Mira volvería a lanzarse a la contienda electoral, esta vez no sólo con el apoyo de los movimientos sociales sino también con el de su antiguo jefe: Hugo Albeiro Quintero. Suárez Mira saldría electo y desde ahí comenzaría a fortalecer su relación con Quintero, pues para él resultaba importante obtener el favor de una persona que, para entonces, era señalado como uno de los principales contactos de Carlos Castaño en el Valle de Aburrá”, se lee en el informe.

Y continúa: “Quintero también saldría ganando de esta alianza, pues su emporio empresarial comenzó a crecer hasta convertirse en una de las empresas de transportes más importantes del Valle de Aburrá. A través del dueño de Bellanita de Transporte, el ahora alcalde Suárez Mira tuvo acceso a casi la totalidad de bandas delincuenciales de Bello con quienes entabló relaciones que se tradujeron en apoyos mutuos”.

Todo apunta a que no estaba equivocada la Corporación en su análisis. Líderes sociales consultados por VerdadAbierta.com, que pidieron reserva de su identidad, ubican como principal prueba de dichos apoyos mutuos la creación de la Mesa de Trabajo por la Paz y la Convivencia de Bello. Una de las primeras tareas que adelantó Olga Suárez Mira, hermana de Óscar, tras ser elegida como alcaldesa en 2004, fue contactar a una serie de personas que tenían injerencia en las actividades criminales de este municipio, a fin de concretar una serie de iniciativas que permitieran reducir los altos índices de muertes violentas que para ese entonces azotaba a Bello.

En esta actividad fue vital la ayuda de Óscar Suárez. Fue así como nació, mediante Resolución 847 del 9 de septiembre de 2005, la “Mesa de Trabajo Municipal por la Paz y la Sana Convivencia del Municipio de Bello”, donde tuvieron asiento 14 jefes de bandas de Bello, siendo los más destacados Jader Botero, alias ‘Gancho’, quien hoy se encuentra desaparecido; y Evelio Restrepo, asesinado en 2009.

La Mesa no solo contó con el apoyo de la Alcaldía Municipal y el Concejo de Bello, que aprobó un proyecto de acuerdo mediante el cual se destinó el 0.5% de los ingresos corrientes de libre destinación para apoyar proyectos sociales y productivos, sino que también tuvo el visto bueno del entonces Asesor de Paz de la Gobernación de Antioquia, Jaime Fajardo Landaeta y del Programa Paz y Reconciliación de la Alcaldía de Medellín.

De acuerdo con la investigación adelantada por la CNA, “la pertinencia del trabajo de la Mesa radicó en la drástica disminución de los homicidios en la localidad. Durante 2007 y 2008, Bello llegó a registrar diciembres sin muertes violentas, cuando en diciembre de 2004 se presentaron 37 sólo en ese mes. Claro que, según testimonios de ex integrantes de la Mesa de Trabajo, dicha reducción también obedeció al pago que hizo la Alcaldesa Municipal a los representantes de las corporaciones”.

Y al parecer, las elecciones al Congreso de la República de 2006 constituyeron el cénit de los apoyos mutuos, según constató la CNA en su informe. Allí se consignó la versión de un exmiembro de la Oficina de Envigado que narró como miembros de la desaparecida Corporación Democracia, que aglutinaba a desmovilizados de los bloques Héroes de Granada y Cacique Nutibara, acatando una orden impartida por Diego Fernando Murillo Bejarano, alias ‘Don Berna’, movilizaron miles de personas de sus barrios de influencia para que votaran por el político bellanita.

“Óscar Suárez sacó la mayor votación gracias al apoyo que le dimos, a la orden que dio ‘Don Berna’ para todo el Valle de Aburrá. El enlace político era Fabio Acevedo, quien nos visitaba frecuentemente en Bello y nosotros íbamos casi todos los días a Itagüí (…) Fabio le dio 300 millones de pesos a Evelio Restrepo para que repartiera entre los muchachos. Taxicol y Bellanita pusieron los buses y los taxis. Todo el que se montaba en esos carros ya sabía por quién votar. En Bello, le pusimos más de 75 mil votos. El 12 de marzo, Óscar llamó a ‘Don Berna’ a la cárcel de Itagüí para agradecerle su apoyo”, se lee en el documento.

Los nexos de Suárez Mira con sectores ilegales va más allá de haber tejido alianzas con grupos paramilitares. La Corte Suprema de Justicia valoró algunos testimonios de personas que relacionaron al excongresista con grupos criminales ligados a la llamada ‘Oficina de Envigado’. De tal suerte que, en su decisiòn, el alto tribunal pidió investigar esa conducta.

“Denota los vínculos de todo orden del procesado con grupos ilegales del más variado acento, hasta el punto que con la autonomía inherente a cada conducta, las persistentes referencias a Óscar de Jesús Suárez Mira son inocultables, por lo cual se debe investigar por separado las alianzas o convenios entre el procesado y ese tipo de organizaciones delictivas”, señaló la Corte.

¿Vendrán cambios?
Óscar Suárez Mira fue capturado por las autoridades el 26 de enero de 2011. Y desde su sitio de reclusión mantuvo su injerencia en la política bellanita. Fue así como dio el visto bueno para que todas las fuerzas políticas de estemunicipio se unieran en torno a un candidato único, Germán Londoño, quien a la postre fue el único aspirante a la Alcaldía de Bello. Londoño perdería de manera histórica en las urnas con el voto en blanco.

Carlos Muñoz recogió las banderas de la casa Suárez luego de la estruendosa derrota de Londoño. Cuando todos pensaron que los Suárez serían derrotados en las urnas, Muñoz se impuso a su contendiente Luz Imelda Ochoa, en unas elecciones atípicas realizadas un 16 de diciembre de 2011.  

Actualmente, varios movimientos cívicos de esta localidad del norte del Valle de Aburrá adelantan un proceso de revocatoria del alcalde Muñoz. Lo anterior, según palabras de León Fredy Muñoz, concejal de Bello por el Partido Verde, constituye una muestra fehaciente del desgaste de la familia Suárez Mira ante la población; además, dijo, la decisión de la Corte Suprema de Justicia constituye un “golpe de gracia” para este movimiento, en el que “yahay desgaste a su interior, la gente de ese grupo político está desorientada, desmoralizada. Y creo que esto puede acelerar esa caída política”.

Por su parte, para la líder política Luz Imelda Ochoa, habrá que darle “tiempo al tiempo”, pues “ellos siguen siendo poder y siguen haciendo manifestaciones de que son poder. Perdieron al líder, la cabeza, pero como en todo, vienen las reorganizaciones, las deserciones, las peleas internas. Habrá que esperar a ver qué de esto sucede. Es cierto que en Bello están pasando cosas, pero habrá que esperar”.