El Cuerpo Técnico de Investigaciones (CTI) capturó en Medellín al diputado César Pérez García, investigado por su presunta responsabilidad en la masacre de 43personas en Segovia, Antioquia, realizada por paramilitares el 11 de noviembre de 1988.
La orden de captura fue emitida por la Corte Suprema de Justicia como parte de la reapertura del expediente hace ya dos meses, pues consideró que allí se había cometido un delito de lesa humanidad y decidió vincular a las investigaciones al diputado y ex congresista antioqueño. A Pérez García se le investiga por los presuntos delitos de homicidio múltiple agravado, lesiones personales múltiples agravadas, concierto para delinquir y daño en bien ajeno.
De acuerdo con los testimonios y los documentos evaluados por la Alta Corte, la masacre hizo parte de las operaciones paramilitares contra los militantes y simpatizantes de la Unión Patriótica (UP) que, para esa época le había ganado las elecciones al Partido Liberal, de donde procede Pérez García, y tenía gran aceptación entre los pobladores de Segovia y municipios vecinos como Remedios.
A Pérez García lo incriminan paramilitares como Alonso de Jesús Baquero Agudelo, alias ‘el negro Vladimir”, quien fue uno de los autores materiales del múltiple asesinato. De acuerdo a versiones entregadas a las autoridades judiciales, Pérez García presuntamente incitó a los paramilitares para que cometieran ese crimen: “él le pidió a Fidel Castaño que sacara a la U.P. de Segovia, Fidel Castaño lo conectó con Henry Pérez y ya ellos en reunión explicaron los motivos para la masacre”, dijo ‘Vladimir’ a los investigadores que ahora procesan a Pérez.
Inicialmente, el cacique liberal fue procesado y capturado el 8 de agosto de 1995, pero los cargos en su contra fueron retirados por asuntos técnicos. El proceso cesó a su favor el 29 de agosto de 2000, cuando un juez lo absolvió de los cargos.
El Movimiento de Víctimas de Crímenes de Estado (Movice), capítulo Antioquia, aseguró que esta incursión sangrienta de paramilitares debe ser considerada como uno de los primeros casos de parapolítica en el país, pues a su juicio contempló la articulación de militares, políticos y paramilitares para recuperar el poder político que le arrebató la UP. En las elecciones de 1992 el Partido Liberal recuperó su poder regional en el Nordeste antioqueño.
Los investigadores del CTI encargados de la captura se hicieron presentes en el recinto de la Asamblea Departamental de Antioquia y llegaron justo cuando el diputado Pérez García intervenía en una sesión plenaria dedicada a debatir los resultados financieros de la Fábrica de Licores y Alcoholes de Antioquia (FLA). Al ser informado que lo buscaban para hacer cumplir la orden de captura, solicitó que lo dejaran bajar al sótano de la edificación, donde funcionan los parqueaderos, y allí se entregó a la justicia.
Pérez García, abogado de profesión y oriundo del municipio de Remedios, se desempeñó por cinco períodos como Representante a la Cámara; además, ha sido Concejal y Diputado, y presidió la Federación Nacional de Diputados. Es fundador del movimiento Convergencia Liberal, un sector del Partido Liberal en Antioquia. En sus actividades en el sector privado se desempeña como Rector y Miembro del Consejo Superior de la Universidad Cooperativa de Colombia a la que se vinculó desde 1976.
Además, su vida política ha estado asociada a prácticas de corrupción y por ello perdió la curul en la Cámara deRepresentantes en enero de 1994 y su asiento en la Asamblea Departamental de Antioquia en el 2010. Además, fue condenado recientemente a 8 años de detención domiciliaria tras comprobársele malos manejos administrativos cuando se desempeñó como Presidente de la Asamblea en 1998.
En las últimas semanas también ha sido señalado por paramilitares que actuaron en el Urabá antioqueño como uno de sus financiadores y socio en negocios relacionados con las apuestas del chance. De él han hablado en audiencias ante fiscales de la Unidad de Justicia y Paz, Fredy Rendón Herrera, ex comandante del bloque Elmer Cárdenas de las Autodefensas Campesinas de Córdoba y Urabá, y Raúl Hasbún Mendoza, ex jefe del frente Arlex Hurtado de las Autodefensas Unidas de Colombia.
Una vez sometido al CTI, de inmediato fue conducido a las instalaciones de la Fiscalía en Medellín. De acuerdo con fuentes de la Corte Suprema de Justicia, el diputado antioqueño deberá permanecer en una cárcel a esperar allí las decisiones de la justicia.
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