Tras la muerte de Fidel Castaño, sus hermanos impulsaron la expansión del paramilitarismo hacia el Urabá antioqueño. De esa forma, nació el Bloque Bananero que lideró alias ‘H.H.’
Los paramilitares del Bloque Bananero delinquieron en Turbo, Apartadó, Chigorodó y Mutatá, entre 1995 y 2004. / Foto archivo Semana – El ‘Para-Estado’ del Urabá – La sombrilla legal de los paramilitares en Urabá – Los reclamantes de tierras y la muerte en Urabá – Bandas criminales impiden reparar a víctimas del Urabá – “El Gobierno quiso callarme”: Alias ‘H.H’ |
El Bloque Bananero que delinquió en los municipios de Turbo, Apartadó, Chigorodó y Mutatá, en el Urabá antioqueño, y que dejó cientos de víctimas en esta zona del país, tuvo sus orígenes en las autodefensas que creó Fidel Castaño en el Urabá cordobés a finales de la década de 1980.
Lo que empezó como un grupo reducido de hombres armados de forma artesanal, se convirtió en una máquina de guerra financiada por los empresarios bananeros y ganaderos, según lo han confesado los exjefes paramilitares que delinquieron en la región.
Durante la reanudación de la audiencia de control de legalidad que se realiza contra Hébert Veloza alias ‘H.H.’, exjefe paramilitar de este Bloque y extraditado a Estados Unidos en mayo de 2008, la Fiscalía 17 de Justicia y Paz documentó y narró los orígenes de este grupo paramilitar, que se desmovilizó el 25 de noviembre de 2004 con 454 hombres en Turbo, Antioquia.
‘Los tangueros’ o ‘Mochacabezas’
Tras el asesinato de su padre Jesús Antonio Castaño por parte del IV Frente de las Farc, Fidel Castaño armó a finales de la década de 1980 un grupo de autodefensa de 50 hombres, que financió con su dinero y con el de ganaderos de Valencia y Tierralta, en el Urabá cordobés, donde tenía tierras y fincas, entre ellas, Las Tangas.
En una versión libre que rindió el 11 de septiembre de 2007, Jesús Ignacio Roldán alias ‘Monoleche’ contó que ingresó a este grupo pensando que trabajaría en prestar seguridad a las fincas ganaderas de la zona. “Cuando llegamos, ‘Aníbal’, un sargento retirado del Ejército, nos dijo que hacíamos parte de las autodefensas campesinas. Muchos pedimos la palabra y le contamos que no veníamos a eso. ‘Aníbal’ nos dijo que escucháramos el discurso y que luego decidíamos si nos quedábamos o no. El que se decidiera se quedaba”, contó alias ‘Monoleche’.
Según lo documentó la Fiscalía, de este primer grupo hicieron parte alias ‘Salvador’, ‘Aníbal’, ‘Trato’, ‘Estopín, ‘Rastrillo’, ‘Toronja’, ‘Bracho’, ‘Pitufo’, Carlos Mauricio García alias ‘Doble Cero’, Jesús Emiro Pereira alias ‘Huevoepisca’, Lorenzo Córdoba alias ‘Barbas’, Jhon Henao alias ‘H2’, ‘Monoleche’, como escolta de alias ‘H2’, y Manuel Arturo Salón alias ‘JL’, como instructor.
El grupo tenía como base la finca Las Tangas, desde donde salían a delinquir por las zonas rurales de Córdoba con el pretexto de combatir al Epl y a las Farc. El exparamilitar Elkin Casarrubia alias ‘El Cura’, que antes de ser paramilitar fue guerrillero del Epl, contó que el grupo de Fidel Castaño era conocido en la región como Los Tangueros (por el nombre de la finca) o Autodefensas del Mono López, en relación con el exgobernador Jesús María López, investigado por ‘parapolítica’.
“Yo combatí a esas autodefensas entre 1989 y 1990. Pensamos que los finqueros se habían revelado a la guerrilla. No eran muchos pero tenían presencia en Valencia, Tierralta, Arboletes y San Pedro de Urabá”, dijo alias ‘El Cura’.
Aunque en 1991 el Epl se desmovilizó y como parte de esa negociación Fidel Castaño prometió acabar con su grupo de autodefensa, la Fiscalía documentó que eso no sucedió. “En 1992 Fidel Castaño sostuvo una guerra con Pablo Escobar. Tras la muerte de Escobar en diciembre de 1993, Castaño, que se escondía en San Pedro de Urabá, regresó con la idea de expandir las autodefensas junto alias ‘Doble Cero’, que venía de prestar seguridad a una comercializadora de banano en Apartó. Alias ‘JL’ fue encargado como instructor militar”, explicó La Fiscalía.
“No digan que Fidel murió”
Esa fue la orden que impartió Carlos Castaño el 6 de enero de 1994, después de que sus subalternos le informaron en un potrero cercano a la finca Las Tangas que su hermano, conocido con el alias de ‘Rambo’, había muerto en un combate con las Farc.
Alias ‘Barbas’, quien quedó en libertad por orden de un juez ysigue delinquiendo en el Urabá, alcanzó a contarle a Justicia y Paz que fue testigo de la muerte de alias ‘Rambo’. “Entre San Pedro de Urabá y Santa Catalina nos salió la guerrilla. Vimos que estaban en un cerro y nos fueron cercando. El único que murió ese día fue Fidel”, dijo el paramilitar.
En versiones libres, alias ‘Barbas’ y ‘Monoleche’ contaron que, contrario a lo que pensaban ‘Los Tangueros’, el grupo no se acabó porque Vicente y Carlos Castaño prometieron que exterminarían la guerrilla de la región, como una forma de venganza por la muerte de su padre y hermano.
Según los paramilitares, los hermanos Castaño instalaron para ello una base de entrenamiento en la finca El Tomate, donde alias ‘Doble Cero’ fue designado instructor militar. Alias ‘Monoleche’ calculó que en tres años de allí salieron entrenados 7.000 paramilitares, que luego se llamaron Autodefensas Campesinas de Córdoba y Urabá, Accu.
La Fiscalía documentó que para finales de 1994 y comienzos de 1995, los Castaño ordenaron la incursión en el norte del Urabá antioqueño a cargo de alias ‘Doble Cero’.
El comando de Los Escorpiones
En el Urabá antioqueño las víctimas conocieron a los paramilitares como los ‘parascos’. Y los primeros que llegaron al norte de Turbo así como a Apartadó, Carepa y Chigorodó, municipios llamados del Eje Bananero, fueron un grupo a cargo de alias ‘Doble Cero’.
“Según un relato del hermano de ‘Doble Cero’, en esta zona realizaron un operativo llamado ‘Pulga: pica y salta’, para combatir a la guerrilla. En 1995 ya tenía control sobre la región”, dijo la Fiscalía.
Alias ‘Barbas’ dijo que en ese afán por expandirse, abusaron contra la población civil y asesinaron a víctimas inocentes por vivir en zonas señaladas como de influencia guerrilla. El exjefeparamilitar Hébert Veloza alias ‘H.H.’, que fue conocido en el Urabá antioqueño como ‘Carepollo’ o el ‘Mono Veloza’, contó en versión libre cómo se unió a los paramilitares de alias ‘Doble Cero’.
“Las Farc me quitó el camión con el que yo transportaba plátano en el Urabá. Era la única forma de subsistencia de mi familia. Ante la falta de oportunidades, supe que los Castaño estaban buscando gente. En un casa del barrio El Poblado (en Medellín), Carlos y Vicente me dijeron que me daban trabajo. Yo hice parte del ‘Grupo de los 20’ que fue enviado al Urabá”, contó alias ‘H.H.’.
Según la Fiscalía, entre el ‘Grupo de los 20’ estuvo alias ‘Gabriel’, ‘Estopín’, ‘Barbas’, ‘Wilson’, ‘Tribilín’, ‘Úber’, ‘Tigre’, ‘Escudero’, ‘Caimán’, ‘Carroloco’, ‘El Gato’, ‘Olafo’, ‘Montador’, ‘San Pedro’, ‘Pacheco’, ‘Negro Fino’, ‘Caturro’ y su hermano ‘Barney’. “A finales de febrero, principios de marzo de 1995, fuimos enviados en un camión desde la Finca La 35 (Córdoba) hacia la vereda El Limón, en el municipio de Turbo. Allá recibimos material de intendencia y salimos hacia la vereda El Dos, donde quemamos unas viviendas en retaliación a que no encontramos a alias ‘Mocho’ y ‘Tachuela’, dos guerrilleros que estábamos buscando”, contó alias ‘H.H.’.
El exjefe paramilitar contó que el ‘Grupo de los 20’ se dividió en dos: uno de paramilitares rurales que instaló una base en la vereda Monteverde, y otro de paramilitares urbanos, integrados por siete de ellos, que se llamó el comando de Los Escorpiones para hacer ‘inteligencia’ en los pueblos.
El Informe 050 del 27 de diciembre de 1996, elaborado por un grupo de investigadores del CTI de Medellín y desempolvado por la Fiscalía 17 de Justicia y Paz, advertía desde entonces que los paramilitares se habían tomado el norte del Urabá antioqueño a cargo de alias ‘H.H.’, y que lo hacían en lugares públicos, en las narices de las autoridades y en vehículos hurtados como un Suzuki blanco que los paramilitares bautizaron “Camino al cielo” y que los pobladores conocían como “los carros de la muerte”. El informe presentó una radiografía de la zona, y de los 54 asesinatos que hacían parte de 35 investigaciones que habían quedado archivadas.
“Entre 1995 y mediados de 1996 nosotros cometimos muchas masacres. Los siete nos movilizábamos en tres carros, haciendo recorridos por el Eje Bananero”, confesó alias ‘H.H.’. La Fiscalía documentó que La Curva del Diablo, el sector de Codelsa y La Caleta fueron los sitios donde Los Escorpiones arrojaron los cuerpos de las víctimas.
Los Escorpiones fueron el inicio del Bloque Bananero, el grupo paramilitar de alias ‘H.H.’. Durante las siguientes audiencias de legalidad de cargos contra exjefe paramilitar y que se realizarán hasta el jueves 19 de mayo de 2011, la Fiscalía contará cómo delinquió este Bloque a lo largo del norte del Urabá antioqueño.