La Unidad de Justicia y Paz de la Fiscalía compulsó copias para que se investigue al excomisionado de Paz y a dos altos oficiales por la aparente falsa desmovilización de un bloque de las Farc en Tolima, el 7 de marzo de 2006.
La Unidad de Justicia y Paz de la Fiscalía compulsó copias al jefe de la Dirección Nacional de Fiscales para que investigue un posible ‘falso positivo’ en la entrega de un bloque de las FARC, compuesto por 66 supuestos guerrilleros, que se realizó en Alvarado (Tolima) el 7 de marzo del 2006.
Las autoridades investigan si la desmovilización fue un montaje del Ejército y del entonces Comisionado para la Paz, Luis Carlos Restrepo, dijo la Fiscalía General.
Luis González León, director de la Unidad Nacional de Justicia y Paz, quien investiga los crímenes perpetrados por integrantes de organizaciones armadas al margen de la Ley como guerrilleros y paramilitares, explicó que las investigaciones se concentran en dos altos oficiales del Ejército y en Restrepo.
“Al menos tres desmovilizados sostienen que toda esa desmovilización fue una mentira, que consiguieron la gente y que compraron las armas que iban a entregar”, dijo González León a la agencia de noticias AP.
Los uniformados en la mira de la Fiscalía, agregó el fiscal, son el general retirado Lelio Suárez y el coronel Jaime Joaquín Ariza, quienes no hicieron ninguna declaración pública sobre la acusación en su contra.
Según la investigación, en el supuesto montaje al parecer también participó un guerrillero desmovilizado de las Farc, Raúl Agudelo Medina, alias ‘Olivo Saldaña’, quien fue nombrado por el gobierno del expresidente Álvaro Uribe como gestor de paz.
La Revista SEMANA, en su edición del 11 de marzo del 2006 (ver artículo), reveló que Agudelo fue presentado por el Gobierno y el Ejército como el jefe de la compañía guerrillera ‘Cacica La Gaitana’, que delinquía en el sur del Tolima y que, se suponía, era parte importante de la estructura de ‘Alfonso Cano’.
En ese entonces, Luis Carlos Restrepo dijo que “el señor Agudelo es un colaborador del Estado y gran impulsor de las políticas de desmovilización”, y el general Mario Montoya, comandante del Ejército, se refirió a él como “un hombre con el que venimos trabajando”.
Agrega el informe de SEMANA que lo que no se dijo públicamente en ese momento es que Saldaña, que era jefe de finanzas de las Farc en el sur del Tolima, desertó en 2004, y en agosto de ese mismo año fue detenido por la Policía. Desde esa fecha, está preso por rebelión y afrontando 19 procesos judiciales por secuestro, homicidio y extorsión.
Al ver que su situación jurídica empeoraba cada vez más y su perspectiva era pasar varias décadas en la cárcel, Saldaña se contactó con el Ejército y se convirtió en informante. Al mismo tiempo, su abogado, Enrique Arango, comenzó contactos con la oficina del Alto Comisionado para lograr que fuera cobijado por la Ley de Justicia y Paz. Así empezó la historia de la desmovilización que hoy es objeto de investigación.
De acuerdo con declaraciones de tres desmovilizados, difundidas porla emisora La FM, Restrepo estaba enterado del supuesto montaje para el que se reclutaron, en distintas regiones del país, a ladrones, indigentes y desempleados para hacerlos pasar por guerrilleros de las Farc.
En entrevista con La FM, Restrepo precisó que estuvo presente en toda la desmovilización, que “nunca tuvo sospechas” de alguna irregularidad en el proceso y que de haber sido así habría denunciado a las autoridades competentes cualquier anomalía.
Minutos después de hacerse pública la decisión de la Fiscalía, el expresidente Álvaro Uribe señaló en su cuenta de Twitter que “Luis Carlos Restrepo es un patriota inmaculado”.
Revista Semana