La Corte Suprema llamó a declarar a estos ex jefes paramilitares en el juicio contra los ex congresistas santandereanos Luis Alberto Gil y Alfonso Riaño por parapolítica.
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| Alfonso Riaño y Luis Alberto Gil serán enjuiciados por sus presuntos nexos con paramilitares por la Corte Suprema de Justicia. |
La Sala Penalde la Corte Suprema de Justicia llamará a rendir versión a los ex jefes paramilitares ‘Diego Vecino’, ‘Ernesto Báez’ y ‘Julián Bolívar’, dentro del juicio que se adelanta contra los ex congresistas Luis Alberto Gil y Alfonso Riaño por los delitos de concierto para delinquir y constreñimiento al sufragante en complicidad con grupos paramilitares que delinquieron en Santander.
De igual forma, la ex representante a la Cámara, Yidis Medina, rendirá declaración ante la Corte junto con el actual gobernador de Santander, Horacio Serpa, y el también congresista santandereano Bernabé Celis.
La Corte buscará con estos testimonios definir cómo se aliaron políticos y paras en Santander desde los noventas y cuál pudo haber sido la participación de los grupos paramilitares en la elección de congresistas en 2002 y 2006, particularmente, de aquellos que pertenecieron al partido Convergencia Ciudadana, fundado por Gil.
Entre las pruebas negadas por el Alto Tribunal, está el testimonio del magistrado auxiliar de la Sala Penal, Iván Velásquez, y de los analistas León Valencia y Claudia López, considerándolos “impertinentes” para explicar los hechos por los cuales son procesados ambos ex congresistas.
El ex senador Gil es investigado por su presunta relación con los ex jefes paramilitares del Bloque Central Bolívar, Iván Roberto Duque, alias ‘Ernesto Báez’ y Rodrigo Pérez Alzate, alias ‘Julián Bolívar’.
En mayo de 2008, David Hernández López, alias ‘Diego Rivera’, un teniente retirado que trabajó para varios jefes paramilitares y que se entregó a la justicia norteamericana, sindicó a Gil con ‘Julián Bolívar’ en una entrevista a Semana.
Según Hernández, Luis Alberto Gil asistió a una reunión con él para mediados de marzo del 2006 en la que Julián Bolívar le notificó a un grupo de políticos, entre los que se encontraban Alfonso Riaño, Óscar Reyes y Óscar Suárez Mira, su apoyo económico en las próximas elecciones.
El proceso contra Riaño y Gil
En julio de 2009, un Fiscal Delegado ante la Corte llamó a juicio a los ex congresistas de Convergencia Ciudadana Luis Alberto Gil y Alfonso Riaño por sus presuntos nexos con paramilitares en Santander.
En 253 folios el fiscal encargado del caso plasmó los argumentos de la providencia mediante la cual llama a juicio a los ex congresistas Luis Alberto Gil y Alfonso Riaño, por su presunta responsabilidad en calidad de autores de los delitos de concierto para delinquir agravado, por promover y apoyar grupos armados ilegales, y constreñimiento al sufragante.
Según El Espectador el llamado a juicio viene luego de que la Fiscalía considerara que hay pruebas para señalar que estos políticos se reunieron con Ernesto Báez y Julián Bolívar ocurridas en Medellín, Puerto Berrío y Bucaramanga; además que existen cartas en las que se le reporta a las autodefensas el número de votos obtenidos de los candidatos; múltiples declaraciones de ex concejales de Barrancabermeja (Santander) y de subalternos de Macaco, entre otros.
En ese momento, el diario también reveló que la Fiscalía documentó un segundo encuentro, en enero de 2002, entre Gil y los ‘paras’ Báez y RodrigoPérez Alzate, alias Julián Bolívar. A la reunión, llevada a cabo en Puerto Berrío, Antioquia, también acudieron varios concejales de Barrancabermeja que fueron convocados, según declararon al ente acusador, para que el Movimiento Alternativo Regional (MAR) apoyara a Nelson Naranjo, segundo renglón de José Manuel Herrera a la Cámara de Representantes. Así lo testimoniaron ex concejales como Morgan Egea Sánchez, Jesús Sanabria y José Agustín Quecho.
La reunión duró una hora y, según la Fiscalía, tanto Luis Alberto Gil, como el ex gobernador de Santander, Hugo Aguilar, querían que se sellara un pacto para favorecer a Naranjo y a Herrera, quien hoy también está procesado por sus nexos con las autodefensas. Gil le reconoció a la Fiscalía los dos encuentros, mediados, según dijo, por el diputado de Antioquia Leonardo Zapata. Pero sostuvo que lo hizo para reclamarle a Báez por las dificultades que tenía su movimiento para hacer campaña, así como las amenazas para que miembros de su grupo apoyaran al candidato de esa organización Carlos Clavijo.
Con este llamado a juicio el Fiscal desencadenó una serie de decisiones inesperadas, como que ordenó compulsar copias a la sala penal de la Corte Suprema de Justicia para que investigue al locutor y ex senador Juan Manuel González, por presuntos nexos con grupos ilegales y delitos de constreñimiento al elector en los que pudo incurrir al llegar al Senado como segundo renglón de Gil.
Gil y Riaño permanecen detenidos en la cárcel La Picota en Bogotá, desde noviembre de 2008.
Ambos habían renunciado a sus curules por lo que sus casos había pasado de la Corte Suprema de Justicia a la justicia ordinaria hasta finales del año pasado cuando la Corte reasumió la competencia para juzgar este tipo de casos.
Los dos ex congresistas santandereanos de los partidos Convergencia Ciudadana y Cambio Radical habían sido llamdos a rendir indagatoria en 2007 por la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia.
