Los procesos de restitución de tierras están estancados. Algunas ONG señalan que se podría agilizar a través de la restitución administrativa en casos en donde no hay oposición. Así, dicen, se podría restituir hasta 3,6 millones de hectáreas.

Nadie dijo que sería fácil. Desde que se planteó la restitución de tierras arrebatadas o abandonadas en medio del fragor del conflicto armado en la Ley de Victimas y Restitución de Tierras, eran pocas las probabilidades de alcanzar la meta de 6,5 millones de hectáreas restituidas dentro de 10 años.

Pero al ritmo actual en que van los procesos de restitución, tomaría unos 109 años para alcanzar la meta, según la Fundación Forjando Futuros, que monitorea los casos de restitución.

A 13 años de la aplicación de la ley se ha alcanzado poco más del 10 por ciento de los 6,5 millones de hectáreas proyectadas: al 18 de abril 2024 sólo se ha logrado restituir 668,560 hectáreas en todo el país. (Leer más en: Agridulce ha sido la restitución de tierras en Colombia)

“No podemos seguir así,” dijo Nora Saldarriaga, directora de Forjando Futuros al presentar las cifras de la investigación sobre el proceso de restitución. “Los campesinos no pueden esperar 109 años para que la restitución sea una realidad.”

Saldarriaga destacó que en los primeros 17 meses del gobierno del presidente Gustavo Petro se ha restituido sólo 71.000 hectáreas comparado con 161.000 hectáreas en los últimos 17 meses del expresidente Iván Duque, aunque el número de familias beneficiadas ha sido mayor durante el actual gobierno (2.250 vs. 1.757).

Saldarriaga dijo que la solución del estancamiento en el proceso pasa por la aprobación en el Congreso de la República del Proyecto de Ley 280 de 2022, que busca darle facultades a la Unidad de Restitución de Tierras (URT) para adelantar el proceso de restitución de tierras por vía administrativa en casos en donde hay un sólo reclamante.

Actualmente el proceso de restitución tiene dos fases: la primera, administrativa, en manos de la URT; y la segunda, judicial, a cargo de los Tribunales de Restitución de Tierras. Una vez la URT aprueba la solicitud de restitución pasa a los tribunales que tienen un plazo de 120 días para resolver. Sin embargo, según Ilhan Can, investigador de Forjando Futuros, ese plazo se ha cumplido en menos del uno por ciento de los casos.

“En la fase judicial hay una tremenda sobrecarga. Los procesos se están demorando años y años,” dijo. El promedio, añadió, es de tres años.

En el 72 por ciento de los 16.085 casos resueltos judicialmente no ha habido oposición, lo que significa que la víctima es el único reclamante. “Estos podrían ser restituidos sin la intervención de un juez,” dijo Can.

Extrapolando las cifras de los casos ya resueltos, Forjando Futuro calcula que por vía administrativa se podrían restituir 3,6 millones de hectáreas —el 64 por ciento de la meta inicial de restitución—.

Al liberar a los tribunales de los casos no controversiales, “se abriría un espacio para acelerar el proceso de la restitución de los casos más complejos; por ejemplo, casos de despojo por empresarios”, dijo Can. “De esa forma se saca el despojo de la impunidad haciendo justicia”.