“Martín Llanos”, el señor de la guerra (Semana)

      
Quién es ‘Martín Llanos’, el comandante de las autodefensas del Casanare, que está en guerra contra otros paramilitares en el Oriente del país. SEMANA habló con él.

La policia internacional -Interpol- tiene un mecanismo por medio del cual identifican a los delincuentes más buscados del mundo: la circular roja. Las personas que hacen parte de esta lista son consideradas como los criminales más peligrosos del planeta. Sus fotos, huellas dactilares, datos biográficos y reseña de sus crímenes son enviados a los 180 países miembros de la organización para ser buscados y arrestados por las autoridades de estas naciones. Su captura es considerada como una prioridad y son catalogados como altamente peligrosos.

Aparte de varios guerrilleros y algunos narcotraficantes colombianos, en la actualidad sólo tres jefes paramilitares son buscados por la Interpol por medio de circulares rojas: Carlos Castaño, Salvatore Mancuso y ‘Martín Llanos’. Los dos primeros son tristemente conocidos por delitos que van desde el narcotráfico hasta masacres. Lo que resulta sorprendente es que junto a los nombres de los máximos líderes de las AUC aparezca en las listas de la Interpol el de ‘Llanos’, un hombre que para la mayoría es un desconocido y que dentro de las estructura del paramilitarismo nacional no es una de las figuras de mayor peso.

Las acciones de ‘Llanos’ durante los últimos tiempos , especialmente en el departamento de Casanare, son las que lo han sacado del anonimato y lo han puesto en la mira de las autoridades.

‘Martín Llanos’, su verdadero nombre es Héctor Germán Buitrago Parada, es hijo de uno de los más antiguos miembros de las autodefensas en el país, Héctor Buitrago. Hace 25 años este hombre creó las autodefensas del Casanare y durante décadas el movimiento paramilitar en esa región del país estuvo liderado por él. A mediados de la década de los 90 fue arrestado y estuvo en la cárcel acusado, entre otros delitos, de conformación de grupos paramilitares.

Cuando el patriarca, del que era conocido como el clan Buitrago, estuvo en la cárcel, su hijo mayor, Héctor Germán, asumió el mando de las Autodefensas del Casanare. Tenía tan sólo 30 años cuando quedó al frente de un ejército de 1.200 hombres. Hoy, con 35, es uno de los jefes paras más jóvenes del país.

Durante varios años su nombre sólo era conocido en las regiones del Casanare, en donde operaba, principalmente en los municipios de Monterrey, Villanueva y Aguazul. ‘Llanos’ comenzó a figurar con mayor frecuencia desde finales del año pasado, cuando empezó a divulgarse públicamente la guerra que se desató entre el bloque paramilitar que él lidera y los miembros del Bloque Centauros. Los dos grupos, que operan en los departamentos de Casanare, Meta y Vichada, están transados en una batalla por el dominio territorial que ha dejado decenas de muertos de cada lado.

La zonas de influencia que disputan las dos facciones son un botín conformado por extensos cultivos de coca, y los dividendos que arrojan las extorsiones a ganaderos, agricultores y comerciantes. Sin embargo, según las autoridades, una de las mayores fuentes de recursos de estos grupos está conformada por los porcentajes de las regalías petroleras que les obligan a pagar a los municipios de la región. “Por lo menos el 70 por ciento de esas extorsiones se atribuyen a las autodefensas, el 20 por ciento a la guerrilla y el 10 por ciento a la delincuencia”, dijo a SEMANA uno de los oficiales del Grupo Gaula del Ejército en el Meta.

De acuerdo con los informes de inteligencia de la Policía la guerra que están librando los dos grupos los ha llevado a “modificar los planes armados vigentes de uno y otro bando, haciendo que en el departamento de Casanare se focalice un conflicto en forma similar a la guerra contrainsurgente desarrollada tradicionalmente por las autodefensas. A causa de la confrontación en mención, la población civil se ha visto afectada”, afirma uno de los apartes del análisis de inteligencia conocido por SEMANA.

Si bien el Bloque Centauros domina, a sangre y fuego, gran parte del departamento del Meta, en donde las autoridades y la población han efectuado denuncias sobre extorsiones y abusos por parte de miembros de este grupo, la guerra entre los bloques paramilitares se siente más intensamente en los municipios de Villanueva, Monterrey y Aguazul, Yopal, Maní y Tauramena (Casanare), zona que está bajo influencia de las ACC de ‘Martín Llanos’. “Desde hace muchos meses los de Centauros están tratando de incursionar en estos municipios y en su afán de defenderse la gente de ‘Martín Llanos’ comenzó a cometer muchos abusos”, afirma uno de los lideres comunales de Yopal. “Antes a los ganaderos les cobraban una cuota de 7.800 pesos por cada res que tuvieran, ahora piden entre 15.000 y 20.000 pesos. A los arroceros antes les cobraban 5.000 pesos por hectáreas recogida y ahora les piden 25.000. Con los contratistas de obras pasa lo mismo, antes era el 10 por ciento del contrato y hoy es entre el 30 y el 50 por ciento.”, concluye.

Como si lo anterior fuera poco, según la Policía de Casanare, como parte del conflicto entre los dos bandos paramilitares se está presentando una serie de homicidios selectivos, principalmente en Yopal, Villanueva y Aguazul. “Es la consecuencia de la aplicación de la estrategia que esos grupos ilegales denominan como ‘eliminación de bases sociales de apoyo”, afirma el informe de inteligencia policial. Una de las últimas víctimas de estas muertes selectivas fue el presidente del comité de ganaderos de Villanueva, José Néstor Caro, un reconocido ganadero que según las autoridades fue asesinado el pasado 4 de octubre por dos sicarios al servicio de ‘Martín Llanos’.

La guerra que libran los dos grupos paras ha obligado a las autoridades a atacar a las dos facciones en contienda. Aunque permanentemente la Policía realiza capturas de milicianos de uno y otro bando, una de las acciones más contundentes ocurrió a comienzos de mayo de este año cuando el Ejército y la Fiscalía ocuparon la que fue durante muchos años una especie de ‘zona de distensión’ de ‘Martín Llanos’: un caserío llamado El Tropezón, en jurisdicción del municipio de Puerto López, a 158 kilómetros de Villavicencio. En el lugar las autoridades encontraron un campamento con pistas de entrenamiento, alojamientos y comedores. También había un laboratorio, en que se almacenaban elementos para el procesamiento de alcaloides. En la misma zona los oficiales hallaron a ocho personas secuestradas, dos de las cuales eran ganaderos que se habían negado a pagarles la ‘vacuna’ a los hombres de ‘Llanos’.

Después de ese golpe las autoridades desmantelaron, a comienzos de julio, una ‘agencia de empleo’ que operaba clandestinamente en un barrio de Villavicencio, la cual se dedicada a reclutar a la fuerza hombres para las ACC. Según reveló uno de los reclutados que consiguió escapar y rindió testimonio ante el CTI, cuando alguien les decía que aceptaba la oferta, de inmediato era llevado a Puerto López, de donde lo conducían hasta El Tropezón. Una vez allí no podían desertar o eran fusilados.

Los golpes en contra de ‘Martín Llanos’ son tan sólo parte de la ofensiva de las autoridades para acabar con la batalla que se libra en el oriente del país. Acciones similares también se han ejercido en contra de los hombres del Bloque Centauros. La semana pasada miembros de la XVI Brigada del Ejército dieron de baja a 17 paramilitares de ese grupo en la vereda Punto Nuevo, jurisdicción del municipio de Orocué-Casanare. Según dijo uno de los oficiales de esa guarnición el objetivo es acabar con las estructuras de lo que llaman ellos los dos señores de la guerra de los Llanos.

No somos traficantes (Entrevista a Martín Llanos)

SEMANA: ¿Las autoridades afirman que las Autodefensas Campesinas del Casanare -ACC-, a través de una de las facciones que opera en Bogotá, puede ser la responsable del carrobomba de Sanandresito el cual estaba dirigido contra las ‘oficinas’ de cobro de sus enemigos del Frente Capital del Bloque Centauros?

MARTIN LLANOS: Ratificamos nuestra posición de que no tenemos ninguna participación ni autoría en el criminal atentado cometido en Bogotá. Si fueramos los autores, ¿qué ganaríamos militar y políticamente con explotar un carro bomba que mata a personas indefensas? El día que decidamos hacer una acción en Bogotá, la heremos directamente y con el convencimiento de no afectar a personas inocentes”.

SEMANA:¿La guerra entre los dos bloques de paramiliatres que se libra en el Oriente del país se ha trasladado a algunos sectores de Bogotá y , según las autoridades locales, en esa disputa la facción de las ACC que operaba en la capital ha sido desplazada por el Frente Capital del Bloque Centauros?

M.Ll.: Hace unos pocos años decidimos iniciar trabajos contra las milicias en Bogotá y sí que les dimos duro. Les dimos seguridad a algunos sectores del comercio haciendo trabajos de inteligencia para desvertebrar a las milicias, hasta que aparecieron las bandas de Arroyave, con apoyo de algunos miembros de la Policía, tomando nuestros sitios y entonces se creó un problema para nosotros pero especialmente para los comerciantes a quienes intimidaban para que los escogieran a ellos. Se presentaron algunos choques y decidimos, para no involucrar civiles inocentes, replegar nuestras unidades y mire en lo que está terminando.
SEMANA: Por qué se desencadenó la guerra en Casanare, Meta y Vichada entre las ACC y el Bloque Centauros?

M.Ll.: Nunca buscamos guerras con gente distinta de las guerrillas. Toda la comunidad sabe que el comandante del Bloque Centauros,Miguel Arroyave, nos atacó invadiendo zonas nuestras en el sur del Meta y atacando a la población civil en el Casanare. Siempre buscamos medios para evitar la guerra pero no encontramos respuesta de Arroyave, pedimos la mediación de personas muy serias para dialogar, pedimos el favor al obispo de Yopal, al Comisionado de Paz, pero nada ha funcionado. Nosotros hasta ahora nos hemos limitado a defendernos de la invasión y hemos sostenido nuestros territorios.

SEMANA:¿Cómo empezaron los combates entre las ACC y el Bloque Centauros?

M.Ll.: Los combates como tal, comenzaron hace como cuatro meses en el sur del Meta y ellos hicieron el primer ataque contra nuestra zona.

SEMANA:¿ cuál fue el detonante de la guerra?

M.Ll.: Es que antes no estaba mandando Arroyave al Bloque Centauros, antes había gente comprometida como autodefensa con el norte claro, con los que no teníamos ningún problema y por el contrario nos prestábamos apoyo en operaciones contraguerrilleras, pero esto cambió con la llegada de este señor a mandar sobre la autodefensa Centauros y los puso a trabajar para sus intereses personales. Centauros existía desde antes, con comandantes reconocidos de la autodefensa. Arroyave adquiere el mando hace poco más de un año y al grupo se le ponen otros objetivos y el que no esté de acuerdo se tiene que morir, porque así son las cosas con ese señor.

SEMANA: ¿En esa guerra cada bando tiene su propia versión y según los miembros del Bloque Centauros, en parte, ellos han ingresado a algunos territorios de las ACC porque usted tiene alianzas con la guerrilla yha dejado que la subversión se apodere de algunas zonas ?

M.Ll.: Como se diría, los pájaros tirándoles a las escopetas. Las ACC iniciaron hace más de 20 años la lucha contra la guerrilla en el Casanare y Meta. Siempre hemos combatido a esos grupos subversivos y esto lo saben los habitantes de la región. Este año pensábamos avanzarles territorio, pero extrañamente el ataque de Arroyave paralizó nuestra intención. Lo que tienen que explicar es por qué nos atacan en conjunto con las Farc. ¿Entonces qué es lo que están frenando?

Hace dos años enviamos tropas a la región del Sumapaz y Tequendama, en Cundinamarca, verdaderos santuarios de las Farc como lo sabe todo el mundo y les provocamos un terrible susto y no nos salieron a pelear. Esa operación nos ha costado mucho en hombres y logística, y allí llegamos llamados por esa comunidad sometida por las Farc en las goteras de Bogotá, hasta que por presiones políticas de la izquierda y los falsos defensores de derechos humanos, pusieron a la Fuerza Pública a perseguirnos especialmente a nosotros, complicando nuestra operación de liberación de esa región y como no estamos formados para matar soldados ni policías tocó dejar la cosaasí para gusto de las Farc. Nuestras operaciones defensivas se mantienen sobre todo en el límite de nuestros territorios en el sur del Casanare, parte del sur del Meta y Boyacá, o ¿cuántos pueblos nuestros se han tomado las Farc?

SEMANA: ¿Cuál es la diferencia ideológica entre las ACC y el Bloque Centauros de Miguel Arroyave?

M.Ll.: La verdad, no lo sabemos, porque no conocemos la ideología de este señor, nosotros somos históricamente autodefensas anticomunistas, como lo era Centauros antes de la llegada de Arroyave.

SEMANA: ¿La guerra es por el control territorial o por el dominio del negocio de drogas, especialmente de cultivos ilícitos en algunas zonas de Casanare y Meta?

M.Ll.: Arroyave pretende asaltar la región de Mapiripán, a la que habíamos liberado de las Farc hace pocos años. Buscamos que el gobierno sustituya los cultivos ilícitos que se encuentran allá para acabar con ese asunto y ayudar a las gentes que sobreviven de ese negro negocio como raspachines, pero Arroyave tiene otros intereses sobre este tema.

SEMANA: La disputa entre los dos bloques ha dejado numerosas bajas de lado y lado. Se afirma que las ACC han perdido mas de 500 hombres en esa guerra. Cuál es su versión?

M.Ll.: En su momento avisamos que Arroyave compró a un comandante nuestro de una contraguerrilla y engañados los llevó a una emboscada en donde no les quedó otra que entregarse, fueron 37 hombres. Dice que tiene en su poder 650 hombres nuestros. No le queda otra que mostrarlos y demostrar que están con vida, de lo contrario los habrá desaparecido y ese es un delito muy grave y tendrá que responder. En lo que sí ha dicho la verdad es que hemos perdido mucho menos hombres que él en los combates.

SEMANA: ¿Cuál es la situación de la guerra entre los dos bloque en este momento?

M.Ll.: En el Casanare no hay enfrentamientos armados, los hay en el sur del Meta. En el sur de Casanare la población civil sufre los secuestros y asesinatos del grupo de Arroyave en acciones de sicariato, que ya produjeron grandes marchas de protesta en Monterrey y Villanueva hace menos de un mes.

SEMANA: Hay denuncias de autoridades civiles, militares y de diferentes gremios que afirma que las ACC cobran hasta el 70 y 80 por ciento de los contratos que se asignan en el Casanare y también reciben dinero por concepto de las ‘vacunas’ de las regalías petroleras en esa región del país.

M.Ll.: Le recuerdo que el Bloque Centauros de Arroyave controla la mitad del Casanare, el norte, y la mayor parte del Meta, entonces si se dice eso, es porque son ellos quienes tienen que estar haciéndolo. Si se cobraran tales cuotas, cómo cree usted que se hayan podido realizar tantas obras en el departamento. A falta de poder acusarnos de narcotraficantes nos acusan de lo que le provoque.

SEMANA: El ejército y el CTI hiceron un operativo en mayo en la zona conocida como ‘El Tropezón’ . Según las autoridades ese era una especia de ‘oficina’ en donde las ACC reclutaban a la fuerza a combatientes?

M.Ll.: Lo invito para que mire las declaraciones de los hombres que capturamos en combates recientemente y que les respetamos la vida, ellos dicen exactamente eso de Arroyave, que los traen y reclutan en otras regiones de Colombia, que los engañan diciéndoles que van a combatir contra la guerrilla, que matan a los que no entren en combate contra nosotros. Aquí nuestras tropas saben perfectamente si el combate es contra la guerrilla o contra grupos de Arroyave, están conscientes y así entran al combate, es que nuestras tropas son de aquí y no de otro lado y es imposible engañarlas.

SEMANA:¿A usted y otros miembros de las ACC los han acusado de estar vinculadas con el narcotráfico. Cree que eventualmente podrían terminar incuídos en una la lista de extraditables a Estados Unidos?

M.Ll.: No somos traficantes de drogas, entonces no entendemos cómo podríamos aparecer en una lista de extraditables. Hacemos presencia en algunas zonas cocaleras que en combate abierto le liberamos a las Farc, pero siempre le hemos dicho al gobierno que estamos dispuestos a ayudar para la sustitución de cultivos, para que esa pobre gente de raspachines arrastrada por las necesidades puedan sostenerse legalmente y dignamente con sus familias, o sea que no nos interesa que el cultivo se prolongue o eternice, pero sí que la gente pueda sembrar otras cosas y así sacar adelante no sólo a su familia sino esas regiones, para beneficio de Colombia. El llamado a extradición de los comandantes Castaño y Mancuso lo vemos como una presión política de Estados Unidos para acelerar la desmovilización de las autodefensas, fue una jugada sucia que debilitó la lucha antisubversiva, porque nada que piden en extradición a la cúpula de las Farc y el ELN, sobre las que sí hay infinidad de pruebas en el negocio del narcotráfico.

SEMANA: ¿Aparentemente el Bloque Centauros cuenta con el respaldo de parte Estado Mayor de las AUC. Cree que, al igual que ocurrió con el comandante del Bloque Metro ‘Rodrigo’ , las AUC apoyarán militarmente al Bloque Centauros en la guerra contra las ACC que usted comanda?

M.Ll.: Tenemos plena confianza en que no todos en las AUC comparten estas cosas. En las AUC hav comandos verdaderamente autodefensas, hombres serios y rectos, que no se prestarán para estas cosas contra otra autodefensa que no les ha causado ningún daño como nosotros. No tenemos ninguna guerra contra las AUC, siempre lo hemos manifestado, nuestro problema es con Arroyave y solo con él, eso sí lo tenemos muy claro, pero Arroyave tratará de involucrar a otras fuerzas de las AUC, alegando que pertenece a esa unión, pero comandantes serios de autodefensa no se prestarán para ese juego de Arroyave.

SEMANA: ¿Por qué las ACC qué no han querido integrarse a la mesa de negociación de las AUC?

M.Ll.: Creemos que cada autodefensa representa una responsabilidad y un compromiso con la región en donde nació y se consolidó. Tenemos una obligación moral con los habitantes de nuestra región para que este proceso de paz no sólo sea entregar armas sino que sirva para llevar desarrollo y seguridad a esas comunidades, nuestro compromiso con nuestros pueblos es hasta el último momento del proceso.

SEMANA:
¿Ustedes a qué acuerdo quieren llegar con el gobierno?

M.Ll.: Participamos en el proceso con la ilusión de ayudar a encontrar caminos de paz para Colombia, queremos demostrar que las ACC no son obstáculo para la paz y para quienes creen que la autodefensa es un problema para la paz. Aspiramos a que nuestros combatientes puedan reinsertarse a la vida civil en condiciones dignas para el sostenimiento de sus familias, que las comunidades se sientan satisfechas y confiadas con la estrategia de seguridad que se diseñe por parte del gobierno para garantizarles sus derechos frente a los grupos terroristas guerrilleros que continuarán con sus fechorias y que la región reciba un gran impulso en programas de desarrollo que reduzca el desempleo y evite posteriormente nuevos factores de perturbación por falta de oportunidades. Cambiamos el fusil por ejercer el derecho de participar en el juego democrático de las ideas dentro del marco de la democracia que hemos defendido. Lo del perdón o la cárcel por nuestros actos, creemos que igual tratamiento se nos deben dar a guerrillas y autodefensas, perdón o cárcel para todos, pero que no se nos diga queriendo empequeñecerlos, que los delitos atroces de los movimientos subversivos son simples delitos políticos como paraguas jurídico, porque lo nuestro también es político en la defensa de un sistema que no queremos que por la fuerza lo cambien por otro autoritario y comunista.

SEMANA: ¿Cómo va la mesa de negociación con el gobierno?

M.Ll.: Va muy bien, lenta pero segura en sus definiciones. No queremos correr para demostrar nada, simplemente nuestra voluntad está expresada y nuestro compromiso es indeclinable, sólo pedimos garantías necesarias para continuarlo sin sobresaltos y que nuestras comunidades queden satisfechas con lo que se pacte. Hemos realizado varios encuentros con el señor Comisionado y la comisión exploratoria en donde superamos temas y nos acercamos a definiciones, es que por más que se levante temprano no amanece más rápido.

SEMANA: ¿Cómo nacieron las ACC y cuál es su historia?

M.Ll.: Las ACC las fundó mi padre, el comandante Héctor Buitrago, hace casi 25 años, luego que sufrió un atentado en su finca en Casanare por parte de la guerrilla, luego a medida que la guerrilla hacía más y más presencia fuimos creciendo apoyados por la comunidad. Esta es una autodefensa que nació aquí, todos somos llaneros, somos autóctonos y paisanos, para nosotros la palabra libertad está dibujada por el Creador en el esplendor de nuestro Llano.

SEMANA: ¿La guerra entre las ACC y el Bloque Centauros tiene alguna posibilidad de terminar en una negociación o terminará con la desaparición física de uno de los grupos?

M.Ll.: Siempre estamos dispuestos a buscar salidas negociadas, nunca nos hemos cerrado a arreglar civilizadamente este asunto, hemos propuesto esa vía y no tenemos respuesta, entonces la respuesta a la pregunta la debe tener Arroyave.

FECHA Octubre 20, 2003 -1120

Publicado en SEMANA