Preocupante aumento de bandas armadas en Colombia. Las hay de dos tipos: las Águilas Negras, que ejercen violencia política y las demás que están de lleno en el narcotráfico y otros negocios ilegales. Pasaron de estar en 115 municipios a 246. Esto encontró una investigación de la Corporación Arco Iris sobre el estado de la guerra en Colombia.
Es realmente inquietante el resultado de la investigación de la Corporación Arco Iris que, cruzando datos oficiales, con trabajo de campo, ha llegado a la conclusión de que la seguridad del país está en problemas por cuenta de las bandas criminales emergentes (Bacrim).
Parte de los logros de la política de Seguridad Democrática frente a las guerrillas, y de haber logrado parar la máquina de terror que eran las AUC con la desmovilización, ahora están en riesgo en 246 municipios, donde estas bandas tienen algún tipo de acción violenta o ilegal.
“Destruyen el orden social para poder florecer”, dijo León Valencia director de la Corporación a Semana.com. “Y allí está su gran riesgo para la seguridad de los ciudadanos, porque atacan a las instituciones, a los líderes sociales, a los políticos honestos, a las familias unidas a los trabajadores organizados”.
El estudio de Arco Iris también hizo un corte de cuentas al estado de las Farc, del Eln y al avance de la parapolítica.
Estos son algunos de los principales hallazgos sobre estas bandas:
– Las bandas criminales en todo el país están divididas en 100 núcleos armados, usan 21 nombres diferentes, que se dedican a cometer delitos, agresiones y asesinatos.
– Estas bandas están en 246 municipios y un cálculo conservador señala que son 8 mil hombres las que las integran. La Costa Atlántica es la zona que más cantidad de núcleos armados concentra (40 por ciento).
– Hay tres tipos de bandas criminales: las emergentes, es decir que son nuevas organizaciones como las Águilas Negras; las de rearmados, que son los desmovilizados que se volvieron a armar, como la de alias Cuchillo en los Llanos Orientales; y las disidentes, que son ex paramilitares que se salieron del proceso de Ralito o nunca quisieron entran, como la de Don Mario.
– Se cree que las Águilas Negras, considerada una banda criminal, hacen presencia en 57 municipios, la mayoría en los Santanderes, el norte del país y el sur del Cesar. (Ver Mapa)
– Llama la atención que las Águilas Negras han sido responsables, según las autoridades, de amenazas contra sindicalistas, concejales, profesores, periodistas, funcionarios de Personerías y Defensorías. “¿Son estas actividades exclusivamente criminales, o tienen algún fin de control social y político? No queda duda de que hay algo más que una motivación simplemente delictiva en las operaciones que realizan”, dicen los investigadores.
– La Organización al Servicio del Narcotráfico es una banda criminal que coincide con la organización de ‘Don Mario’ por la cercanía donde opera (Ver Mapa) y se ha expandido rápidamente a distintos lugares del país.
– Algunas zonas de influencia de los paramilitares están en los 60 municipios del programa gubernamental llamado “Consolidación Social del Territorio”, que buscaba recuperar la institucionalidad en zona de conflicto. La presión militar para perseguir a las “bandas criminales” no es tan intensa en estas zonas, como sí ocurre en las áreas donde operaba el Plan Patriota contra las Farc.
– Hay acuerdos de no agresión entre el Eln o las Farc, con bandas criminales en el suroccidente y suroriente del país para traficar o agredir a otros grupos. Por ejemplo, en Nariño y Cauca hay acuerdos de no agresión para traficar entre Los Rastrojos y el Eln. Igual pasó en el Meta entre las Farc y la Organización Libertadores del Llano de alias ‘Cuchillo’, sin embargo estos grupos se enfrentaron en los últimos meses. Y curiosamente en Arauca, se descubrió que las Farc eran blanco simultáneo del Ejército Nacional y del Eln. Finalmente salieron de la zona.