El Ministerio Público señaló que el ex gobernador Hugo Helodorio Aguilar Naranjo, el ex senador Óscar Josué Reyes Cárdenas, y el ex representante Alfonso Riaño Castillo, tuvieron nexos con las Auc.
Hugo Aguila, ex gobernador de Santander. |
Para el procurador Alejandro Ordóñez, los funcionarios “comprometieron seriamente su responsabilidad en el ejercicio del cargo y de sus funciones al promover y colaborar con grupos armados al margen de la ley, concretamente paramilitares” (ver documento).
De acuerdo con la investigación de la Procuraduría, “los funcionarios habrían accedido a sus cargos gracias al apoyo de los grupos de autodefensa que operaban en el departamento de Santander, específicamente de los comandantes ‘Julián Bolívar’, ‘Ernesto Báez’, Ramón Isaza, ‘Botalón’, ‘Jairo Tarazá’ y la colaboración de ‘César’, subalterno del también paramilitar alias ‘Botalón’”.
El caso del ex gobernador Aguilar
En noviembre de 2004, la Corte Suprema de Justicia llamó a indagatoria Hugo Aguilar por sus supuestos vínculos con las autodefensas, para que respondiera por los delitos de concierto para delinquir agravado, constreñimiento al elector y cohecho impropio.
El ex gobernador fue señalado por los paramilitares Juan Fernando Morales Ballesteros y Orlando Murillo Morales, ex miembros del Bloque Central Bolívar de asistir a varias reuniones con ‘Julián Bolívar’, ‘Ernesto Báez’, Ramón Isaza, ‘Botalón’, ‘César’, y ‘Taraza’.
Otro de los testimonios que existen en contra del ex gobernador de Santander es el del Secretario de Educación Bonel Patiño, quien le dijo a la Fiscalía que su nombramiento en el 2004 fue por petición directa de ‘Báez’: “A mí, Iván Roberto, alias ‘Ernesto Báez’, me dijo: ‘A nosotros nos van a dar una Secretaría, yo voy a pedir la de Educación para que usted vaya allá'”, afirmó Patiño.
El proceso contra Riaño
En julio de 2009, un Fiscal Delegado ante la Corte llamó a juicio a los ex congresistas de Convergencia Ciudadana Luis Alberto Gil y Alfonso Riaño por sus presuntos nexos con paramilitares en Santander.
En 253 folios el fiscal encargado del caso plasmó los argumentos de la providencia mediante la cual llama a juicio a los ex congresistas Luis Alberto Gil y Alfonso Riaño, por su presunta responsabilidad en calidad de autores de los delitos de concierto para delinquir agravado, por promover y apoyar grupos armados ilegales, y constreñimiento al sufragante.
Según El Espectador el llamado a juicio viene luego de que la Fiscalía considerara que hay pruebas para señalar que estos políticos se reunieron con Ernesto Báez y Julián Bolívar ocurridas en Medellín, Puerto Berrío y Bucaramanga; además que existen cartas en las que se le reporta a las autodefensas el número de votos obtenidos de los candidatos; múltiples declaraciones de ex concejales de Barrancabermeja (Santander) y de subalternos de Macaco, entre otros.
En ese momento, el diario también reveló que la Fiscalía documentó un segundo encuentro, en enero de 2002, entre Gil y los ‘paras’ Báez y Rodrigo Pérez Alzate, alias Julián Bolívar. A la reunión, llevada a cabo en Puerto Berrío, Antioquia, también acudieron varios concejales de Barrancabermeja que fueron convocados, según declararon al ente acusador, para que el Movimiento Alternativo Regional (MAR) apoyara a Nelson Naranjo, segundo renglón de José Manuel Herrera a la Cámara de Representantes. Así lo testimoniaron ex concejales como Morgan Egea Sánchez, Jesús Sanabria y José Agustín Quecho.
La reunión duró una hora y, según la Fiscalía, tanto Luis Alberto Gil, como el ex gobernador de Santander, Hugo Aguilar, querían que se sellara un pacto para favorecer a Naranjo y a Herrera, quien hoy también está procesado por sus nexos con las autodefensas. Gil le reconoció a la Fiscalía los dos encuentros, mediados, según dijo, por el diputado de Antioquia Leonardo Zapata. Pero sostuvo que lo hizo para reclamarle a Báez por las dificultades que tenía su movimiento para hacer campaña, así como las amenazas para que miembros de su grupo apoyaran al candidato de esa organización Carlos Clavijo.