Fiscalía formula cargos a tres ‘paras’ por masacre de Barranca

      
Justicia y Paz formula cargos contra tres exparamilitares de las Autodefensas Unidas de Santander y Sur del Cesar, por las masacres de medio centenar de personas en Barrancabermeja entre 1998 y 1999.
 
Barrancabermeja se paralizó durante dos semanas en paro cívico en la espera que los 25 secuestrados fueran entregados y sólo se diluyó cuando los culpables confesaron haberlos masacrado. Foto cortesía Vanguardia Liberal.  

La fiscalía formuló cargos a alias ‘Panadero’, a Hermes Anaya Gutiérrez, alias ‘Chicalá’o ‘Junior’, desmovilizado del Bloque Norte y  a Alexander Gutiérrez, alias ‘Picúa’ por la masacre realizada por las Autodefensas de Santander cometida el 16 de mayo de 1998.

En esa fecha integrantes de las Auscac, asesinaron a siete personas y desaparecieron a otras 25 en cuatro barrios de Barrancabermeja (Santander).  

Por estos hechos, Mario Jaimes Mejía, alias ‘Panadero’, atestiguó en versión libre en 2008 que la masacre había sido ordenada en medio de una borrachera de Camilo Morantes. Morantes fue asesinado después por órdenes de Carlos Castaño.

Según alias ‘Panadero’, el ex jefe paramilitar Rodrigo Pérez Alzate, alias ‘Julián Bolívar’, ordenó la masacre de las 25 personas secuestradas el 16 de mayo a sabiendas de que eran civiles inocentes, entre ellos tres menores de edad. Las víctimas fueron llevadas a San Rafael de Lebrija, municipio de Ríonegro (Santander), donde fueron asesinadas y sepultadas en fosas clandestinas.(Vea el especial de VerdadAbierta.com: “Masacre por error”)

Sobre esta masacre, alias ‘Chicalá’, recorrió en 2008 con un fiscal de exhumaciones de Justicia y Paz la zona rural de Sabana de Torres y la parte baja de Rionegro, ambos municipios cercanos a Barrancabermeja, donde supuestamente están las fosas de 25 desaparecidos. Sin embargo, encontraron que los restos de seis víctimas habían sido movidos de sitio y hasta el día de hoy  sólo se han identificado a cinco de los desaparecidos. El exparamilitar aseguró que las fosas fueron movidas por informantes en busca de recompensas.

Las Ausac comenzaron a sembrar el  terror en Barrancabermeja,  desde mediados de los años noventa, matando pobladores y líderes sociales que condenaban como supuestos guerrilleros.  Alías ‘Panadero’ aseguró que la incursión del 16 de mayo de 1998 duró 40 minutos y  que salieron del Barrancabermeja sin que ninguna autoridad hiciera algo para evitarlo.

La Fiscalía también formula cargos contra  los tres exparamilitares por el asesinato de once personas en agosto de 1998, ocho asesinatos y la desaparición de dos personas más, entre ellas un menor de edad, en febrero de 2009. Todos ellos cometidos en distintos barrios del puerto petrolero.

La audiencia se extenderá hasta el próximo jueves en el Palacio de Justicia de Barrancabermeja.