El asesinato del ex paramilitar, testigo en varios procesos por parapolítica, en Floridablanca fue confirmado por las autoridades. Fuentes de la Corte aseguran que habían perdido contacto con él.
Ramón Ballesteros fue condenado por intentar sobornar a ‘Diego Rivera. Foto Semana. |
David Hernández alias ‘Diego Rivera’, un subteniente del Ejército y desmovilizado paramilitar quien fuera jefe político en Nariño del Bloque Central Bolívar, fue asesinado en una finca de Floridablanca, Santander, al parecer en medio de una riña con un campesino.
Este paramilitar de 46 años había sido testigo protegido en Estados Unidos, y fue quien reveló ante la Corte Suprema los videos que muestran al abogado Ramón Ballesteros intentando sobornarlo para que declarara a favor de los ex congresistas santandereanos Luís Alberto Gil y Alfonso Riaño. Esa fue la última oportunidad que tuvo contacto con la justicia colombiana, y en teoría era testigo protegido por la DEA.
‘Diego Rivera’, quien hizo parte del grupo de asesores políticos de ‘Ernesto Báez’, fue el paramilitar que comenzó la teoría sobre la supuesta venta de ‘franquicias’ por parte de la Casa Castaño a narcotraficantes que querían por medio de Justicia y Paz, evitar laextradición.
“Hernández López se estableció enuna finca ubicada en la vereda San Ignacio, localizada a dos horas de Bucaramanga. Allí pasaba como un agricultor más de la zona, a quien los campesinos conocían con el nombre de ‘Víctor’”, según Vanguardia.com.
Los datos sobre las circunstancias de la muerte se han podido conocer, gracias a que un campesino de la zona se entregó a las autoridades y confesó ser el asesino del ex paramilitar.
Las versiones recogidas por el medio santandereano señalan que el homicidio se cometió “en medio de una acalorada discusión que sostuvo el jueves a las 12:00 del mediodía en la finca de un agricultor, a quien llegó a increpar y amenazar por una conexión de agua común que pasaba por sus linderos”.
‘Diego Rivera’ al parecer había amenazado a sus vecinos con un machete y un cuchillo. El campesino, relató que transitaba por la zona y que al ver la situación le disparó a su víctima.
Las franquicias
Fue en versión libre en mayo de 2008 que Hernández López aseguró que Carlos Mario Jiménez Naranjo había adquirido la franquicia de las autodefensas de Nariño, las cuales se llamarían después Frente Libertadores del Sur’, por un pago de 2 mil millones de pesos que al parecer le dieron a Diego Fernando Murillo Bejarano, alias ‘Don Berna’.
De acuerdo con la versión de Hernández López, en 1998, ‘Don Berna’ le propuso a ‘Macaco’ crear un ejército para que les cuidara las ‘cocinas’, es decir, los centros de producción de cocaína. “Eso de combatir a las guerrillas era un sofisma de distracción”, aseguró Hernández y dijo que fue ‘Don Berna’ quien llevó a ‘Macaco’ a donde los Castaño para hacer la negociación.
Las declaraciones de Hernández fueron las más polémicas del juicio que llevó a la condena de Gil y Riaño, después de denunciara que el abogado Ramón Ballesteros, abogado de Gil, supuestamente lo intentó sobornar con 100.000 dólares para que declarara a favor de los políticos santandereanos. Por este hecho, el 15 de febrero de 2011 el abogado fue capturado en plena audiencia de la Corte y luego condenado(hoy está libre después de haber cumplido tres quintas partes de su pena).
En ese entonces, según ‘Rivera’, el soborno fue una estrategia planeada en la cárcel de Itagüí, donde están presos los exjefes paramilitares del Bloque Central Bolívar.
‘Diego Rivera’ dijo además que estuvo en la reunión del Hotel Chicamocha y que Danilo Camilo alias ‘Alfonso’ fue enviado por ‘Julián Bolívar’ para que en ese encuentro les entregara mil millones de pesos a los políticos de Convergencia para la campaña de 2006. El exparamilitar, protegido como testigo por la DEA, aseguró que Convergencia Ciudadana tuvo nexos con el Bcb.
Hernández fue testigo de otra reunión documentada por la Fiscalía realizada en 2002 en la hacienda Arkansas, en San Rafael de Lebrija. Según las versiones de ‘Ernesto Báez’, y los exparamilitares Juan Fernando Morales Ballesteros y Orlando Murillo Morales, Alfonso Riaño tenía nexos con los paramilitares del Magdalena Medio porque se le veía andar con los jefes paramilitares de las Autodefensas Campesinas de Puerto Boyacá, Arnubio Triana Mahecha alias ‘Botalón’ y su segundo, Álvaro Sepúlveda alias ‘César’.
Según las versiones de esos ex paramilitares, Riaño se reunió en la hacienda Arkansas con ‘Ernesto Báez’. El paramilitar le dijo en ese lugar que lo ayudara a organizar una lista a la Cámara para apoyar la candidatura de Carlos Clavijo al Senado. Para la Fiscalía, Clavijo era el candidato de los paramilitares por el movimiento Convergencia Cívica y Popular, una propuesta que surgió del Movimiento al No Despeje que se opuso al despeje del surde Bolívar en el intento de negociación del Gobierno con el Eln.
La última reunión referenciada por paramilitares fue en 2006 en el Hotel Chicamocha, en Bucaramanga, Santander. ‘David Hernández’ le dijo a la Corte que antes de las elecciones de marzo, él le presentó el proyecto Semillas de Paz-Santander, una propuesta de desmovilizados, a Gil, Riaño, Óscar Josué Reyes y Óscar Suárez Mira. Contó que allí también estuvieron alias ‘Tarazá’, exjefe político del Bcb para Santander, y alias ‘Alfonso’, “que me dijo que iba a entregarles a los políticos mil millones de pesos para las elecciones” por orden de alias ‘Julián Bolívar’.
La primera persona que dio fe de esas reuniones fue la excongresista Yidis Medina quien dijo inicialmente que Convergencia tenía vínculos con los paramilitares y que prueba de ello había sido una reunión, entre 2000 y 2001, entre Gil e Iván Roberto Duque alias ‘Ernesto Báez’ en el corregimiento de San Rafael de Lebrija, en Rionegro, Santander.