La Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia confirmó el fallo de exclusión del proceso de Justicia y Paz contra Francisco Javier Zuluaga Lindo y de paso reveló el entramado que crearon las Auc para intentar salvar al narcotraficante de la extradición.
Los magistrados de la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia confirmaron la decisión de la Sala de Justicia y Paz del Tribunal Superior de Medellín de excluir del proceso de Justicia y Paz al confeso narcotraficante Francisco Javier Zuluaga Lindo, alias ‘Gordo Lindo’, y por esa vía negarle todos los beneficios que contiene la norma, entre ellos una pena alternativa de máximo ocho años de cárcel.
Luego de valorar los testimonios contenidos en el proceso, entre ellos los aportados por varios exjefes paramilitares, el alto tribunal conceptuó que Zuluaga Lindo “nunca perteneció a las Autodefensas y por ello en su caso, como así lo sostuvo y demostró la Fiscalía […] los delitos a él atribuidos no fueron ejecutados por ocasión de la pertenencia a algún grupo armado organizado al margen de la ley”.
La providencia, fechada el 12 de febrero de 2014, advierte que alias ‘Gordo Lindo’ pretendió camuflarse en uno de los bloques paramilitares de las Autodefensas Unidas de Colombia (Auc) para ocultar sus labores de “narcotraficante puro” y evitar, de esa manera, el pedido de extradición que había hecho la justicia de Estados Unidos.
Inicialmente intentaron incluirlo en el Bloque Calima, que operó principalmente en los departamentos de Valle del Cauca y Cauca, pero su comandante, Hebert Veloza García, alias ‘HH’, se negó a incluirlo por cuanto consideró que nunca hizo parte de esa estructura ilegal armada, contraviniendo la orden que había dado en ese momento Vicente CastañoGil.
En carta enviada a la Fiscalía General de la Nación el 28 de agosto de 2012 desde un penal de Estados Unidos, donde está recluido desde mayo de 2008, alias ‘HH’ explicó que Zuluaga Lindo “era una persona que desde el narcotráfico aportó en nuestra financiación con el pago de impuestos al gramaje que imponíamos en las zonas que controlábamos; pero que eso no le otorgaba la condición de autodefensa, ni ningún estatus dentro de la organización”.
Ante esa negativa y para camuflar a alias ‘Gordo Lindo’ como jefe paramilitar, la comandancia de las Auc ordenó la creación de un facción armada que situaron en el sur del departamento del Chocó adscrita al Bloque Pacífico – Frente Héroes del Choco y que desmovilizó 150 hombres el 23 de agosto de 2005, bajo los acuerdos con el gobierno nacional.
Las pistas de esa falsa estructura las dio, inicialmente, el exparamilitar Ember Alfonso Arteaga Ortiz, en versión libre rendida en la ciudad de Medellín el 15 de septiembre de 2010. Detalló ante fiscales de la Unidad de Justicia y Paz cómo se reclutó un grupo de personas ajenas a la organización armada para dar apariencia de verdad a la desmovilización de alias ‘Gordo Lindo’ con el Bloque Pacífico, quien pagó para que se reclutara gente en diversas poblaciones e, incluso, entregó las armas que llevarían a la desmovilización.
“Comencé a laborar como instructor de la gente que había recogido Lex, que fue recogida en Dosquebradas, Risaralda, y en otras partes, y otros que recogió Páez, otros que recogía yo, para ingresarlos para hacer un relleno, para poder completar la cantidad de gente que Gordo Lindo necesitaba para poder participar como jefe paramilitar, de los que recogimos fue una gran cantidad, gente que nunca habían retomado o habían hecho parte de las autodefensas”.
Esta versión fue ratificada por otro exparamilitar, Rover Enrique Oviedo Yañez, quien sostuvo ante la Fiscalía que las personas con las que se desmovilizó alias ‘Gordo Lindo’ fueron traídas de varios lugares, especialmente de Pereira, y las calificó como “ñeros”, palabra con la cual se designa a personas de extracción marginal y sin ningún trabajo fijo o estable.
Otro de los testimonios tenidos en cuenta en este proceso de exclusión fue el del exparamilitar Raúl Emilio Hasbún Mendoza,quien comandó el Frente Arlex Hurtado en el Urabá antioqueño y quien hacía parte de la comandancia de las Auc. El 10 de mayo de 2013 le dijo a la Fiscalía que conoció a alias ‘Gordo Lindo’ “como un narcotraficante que aportaba finanzas a la organización, creo que específicamente al bloque calima”.
Hasbún también admitió que entre la comandancia de esta organización armada se hablaba de varios narcotraficantes que le “habían comprado un cupo a Vicente Castaño para desmovilizarse como autodefensas y solucionar su problema de narcotráfico”. Entre los referidos estaban, además de Zuluaga Lindo, Juan Carlos Sierra Ramírez, Miguel Ángel Mejía Múnera y Héctor Restrepo Santamaría. La providencia afirma, de manera escueta, que ante esa situación, el entonces Alto Comisionado para la Paz, Luis Carlos Restrepo, “permitió que así ocurriera”.
De acuerdo con alias ‘HH’, narcotraficantes como Zuluaga Lindo le pagaban a la organización paramilitar, a través de intermediarios, por lo menos 50 millones de pesos mensuales con el fin de garantizar el transporte de sustancias ilícitas por los territorios dominados por las Auc, particularmente en el Pacífico colombiano.
Para la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia “lo ocurrido con el Bloque Pacífico informa a las claras que el hoy postulado ha buscado por todos los medios vincularse al proceso de Justicia y Paz, aún a costa de mentir acerca de su efectiva pertenencia a alguno de los grupos de la organización armada al margen de la ley, pues, ante la imposibilidad de postularse en calidad de miembro del Bloque Calima, intervino en eltrámite de desmovilización del Bloque Pacífico”.
Agregó también el alto tribunal que “esa parafernalia” descrita por los exparamilitares “necesariamente obedece a la completa desvinculación orgánica de ‘Gordo Lindo’ con las autodefensas, en corroboración de cómo algunos narcotraficantes puros buscaron por todos los medios comprar franquicias o crear grupos de papel que de alguna forma legitimasen la de antemano pretensión espuria”.
A los testimonios, la Sala le sumó una serie de documentos relacionados con la Operación Milenio, realizada en 1999 y dirigida a desarticular poderosas redes de narcotraficantes. A partir de transcripciones logradas en desarrollo de esta investigación se comprobó que Zuluaga Lindo “lejos de actuar por encargo u orden de las autodefensas, particularmente, de la Casa Castaño, operaba en su propio nombre o dentro de una estructura puramente delincuencial de narcotráfico”. Además, quedó demostrado que “la utilización de las pistas de aterrizaje de propiedad de Carlos Castaño, se haría a sus espaldas para evitar pagarle el arriendo de las mismas”.
Otro de los documentos evaluados fueron las solicitudes de extradición presentada por la justicia norteamericana en las cuales no se relaciona a alias ‘Gordo Lindo’ con las Auc, contrario a lo que sí se ha hecho con otros exparamilitares que hoy están pagando sus condenas en Estados Unidos. Contra este narcotraficante había dos notas verbales presentadas por la embajada de ese país en Colombia, la primera de ellas el 7 de octubre de 1999 y la segunda el 7 de diciembre de 2006. Finalmente, fue extraditado en mayo de 2008, junto a otro grupo de paramilitares sindicados de narcotráfico en ese país, donde fue condenado a 21 años de cárcel.
La Sala Penal dejó consignado en su providencia que alias ‘Gordo Lindo’ “conformaba un grupo criminal dedicado exclusivamente al narcotráfico, que para facilitar su tarea y lograr impunidad, pagaba dinero a las autodefensas” y, por tanto, tal circunstancia se constituye en una causal de exclusión del proceso de justicia transicional consignado en la Ley 975, llamada de Justicia y Paz, y sus procesos pasarán a la justicia ordinaria.
Sobre la reparación de las víctimas y los bienes que en su momento entregó Zuluaga Lindo a la justicia, la decisión determina que “en atención a los argumentos presentados por la Fiscalía respecto de los bienes aportados por Francisco Javier Zuluaga Lindo, sigue en pie la afectación de aquellos que se dirigen a reparar a las víctimas del conflicto y que corresponden a las relaciones sostenidas por el ahora excluido con la Casa Castaño, en cuanto, sirvieron para los fines de la misma. Los demás, como se advirtió en la parte motiva de la decisión apelada, deben ser objeto del trámite de extinción de dominio”.
Esta providencia empieza a responder algunos debates que se han abierto en los tribunales de Justicia y Paz sobre la influencia del narcotráfico en el paramilitarismo. Uno de los casos relacionados es la decisión que deberá tomar la Corte Suprema de Justicia sobre la inclusión del delito de tráfico de estupefacientes en el proceso que se lleva en Justicia y Paz contra Miguel Ángel Mejía Múnera, alias ‘El Mellizo’, excomandante del Bloque Vencedores de Arauca y extraditado a Estados Unidos para que respondiera por delitos asociados al tráfico de drogas. (Ver nota: Corte decidirá si ‘El Mellizo’ será juzgado por narcotráfico).