En una región del Urabá antioqueño conocida como Tulapas se cometió el despojo de tierras más grande de Antioquia.
Hasta hace poco más de tres años reposaron en el pequeño y atestado despacho de la Fiscalía 124 de Turbo cientos de denuncias que seguían el mismo patrón: campesinos que señalaban cómo luego de ser desplazados de la región conocida como Las Tulapas fueron contactados por comisionistas para que le vendieran sus tierras a Salvatore Mancuso y varios de sus lugartenientes a precio de nada.
La cantidad de denuncias desbordó la capacidad de reacción del despacho. “Es que eran tantas, con gente muy delicada involucrada de por medio. ¿Cómo íbamos nosotros a resolver eso? Nos tocó escribirle una carta a la mismísima doctora Viviane Morales (entonces Fiscal General de la Nación) para que se apersonara de esos casos. Creo que le entregó esos procesos a una Fiscalía de Derechos Humanos en Medellín. Eso es un expediente inmenso”, reconoce un funcionario de ese despacho.
En realidad, los casos quedaron en manos de la Unidad de Persecución de Bienes para la Restitución, creada por la exFiscal General para agilizar los procesos de restitución de tierras que comenzaron a develarse en el trámite de la Ley de Justicia y Paz. Desde esta Unidad se viene documentado, desde hace dos años largos, toda la barbarie que se cometió en Las Tulapas y que derivó en el despojo de poco más de 20 mil hectáreas de tierra
Otras entidades gubernamentales también han iniciado, de manera simultánea, estudios sobre la magnitud del despojo cometido en esta región. En 2011, la Superintendencia de Notariado y Registro revisó las matrículas inmobiliarias de 1.400 predios rurales de la Oficina de Registro de Instrumentos Públicos de Turbo, que atiende los municipios de Apartadó, Arboletes, Necoclí, San Juan de Urabá, San Pedro de Urabá y Turbo.
En ellas encontraron varias irregularidades, pero la que más se destacó fue que unas pocas personas jurídicas y naturales les compraron, en forma masiva, sus predios a campesinos que habían sido beneficiarios de la reforma agraria en décadas anteriores. Además, esta agencia estatal constató que las ventas se hicieron a través de falsos poderes entregados a terceros. De 103 casos analizados, 75 corresponden a predios en Las Tulapas.
La labor investigativa de ambas entidades ya arrojó sus primeros resultados. En septiembre de 2011, el magistrado Olimpo Castaño, con función de control de garantías de Justicia y Paz de Medellín, ordenó restituir a sus legítimos dueños 15 predios ubicados en las Tulapas, tras hallar, gracias a las pruebas aportadas por la Unidad de Persecución de Bienes, que estos habían sido adquiridos de manera fraudulenta por testaferros al servicio de Fredy Rendón Herrera, alias ‘El Alemán’.
Pero el asunto no ha parado allí. Esta misma Unidad ya inició, ante el Tribunal de Justicia y Paz de Medellín, la solicitud de cancelación de títulos de otros 27 predios que hoy se encuentran en poder de supuestos testaferros de Salvatore Mancuso. Y, de acuerdo con declaraciones entregadas a VerdadAbierta.com por funcionarios del Ente Investigador, se avanza en la documentación de por lo menos 120 casos más que comparten las mismas características: fincas que fueron adquiridas por el Fondo Ganadero de Córdoba entre los años 1997 y 1998 y que hoy hacen parte de complejos caucheros, madereros y ganaderos.
VerdadAbierta.com reconstruyó la historia de Las Tulapas a fin de comprender cómo fue que se tejió un caso de despojo emblemático de Antioquia, en el que participaron varios jefes de las Autodefensas, reconocidos comerciantes de la región agroindustrial e, incluso, entidades como el Fondo Ganadero de Córdoba. Además, para realizarlo, apelaron tanto a mecanismos jurídicos, como la violencia. Vea historia de Tulapas: “Lejos de todas partes, cerca del infierno”