A fines de los ochenta, pequeños grupúsculos de matones armados aparecieron en distintos puntos de los Montes de María y en las regiones aledañas de Sucre, en el Golfo, las Sabanas y la Mojana. En la zona urbana de El Carmen de Bolívar surgió un grupo que se hizo conocer como‘la Mano Negra’. Mientras que en Sincelejo apareció una banda llamada ‘La Cascona’, que incluso figuró en la lista de paramilitares que reveló en octubre de 1987 el entonces ministro de Gobierno César Gaviria ante el Congreso. En esa misma lista, apareció la banda ‘Muerte a Secuestradores y Comunistas’ en Bolívar, Los ‘RR’ en San Juan Nepomuceno, ‘Los Benítez’ en San Pedro y ‘los Encapuchados’ de Colosó. Los Montes de María, con fuerte presencia guerrillera, se volvió uno de los más feroces escenarios de la guerra.
