El cese temporal de los bombardeos a campamentos de las Farc es un gesto de reciprocidad del gobierno frente al cese unilateral que ha mantenido ese grupo guerrillero. Esta es la historia del papel que han jugado los bombardeos en los últimos 20 años.
Si a algo le han temido los guerrilleros de las Farc en los últimos años es a los bombardeos de la Fuerza Aérea Colombiana, el Ejército y la Policía contra sus campamentos en la selva. Así lo reconocieron voceros del grupo subversivo en La Habana, Cuba. “Son absolutamente monstruosas, nos han hecho tanto daño”, le dijo ‘Andrés París’ a VerdadAbierta.com en diciembre de 2012.
Y es que desde que entraron en operación versátiles aviones Super Tucano cargados con bombas inteligentes, la confrontación armada entre el Estado y ese grupo insurgente cambió radicalmente. La estrategia de atacar rápido y por sorpresa significó no sólo la muerte de jefes guerrilleros como ‘El Negro Acacio, ´Marín Caballero’, ‘Alfonso Cano’, el ‘Mono Jojoy’ y ‘Raúl Reyes’; sino en ocasiones la desaparición de frentes enteros.
Por eso que el presidente Juan Manuel Santos ordenara ayer “cesar los bombardeos sobre los campamentos de las Farc durante un mes” con el fin de “impulsar el desescalamiento del conflicto”, es un mojón más en el camino para ponerle fin al conflicto. Es un gesto de reciprocidad con la guerrilla, que ha venido cumpliendo el cese unilateral del fuego, y que también se dispone, junto con los militares, a iniciar el desminado de importantes zonas del país. Según Santos, en un mes se evaluará y decidirá si este cese temporal se extiende o no.
Estudiosos del conflicto armado colombiano como Carlos Medina Gallego han sostenido en diversas ocasiones y ante varios auditorios que es a partir de la modernización de las Fuerzas Armadas que propicia la administración del presidente Andrés Pastrana (1998-2002) y la posterior aplicación de la política de seguridad democrática durante los dos periodos del presidente Álvaro Uribe Vélez (2002-2006; 2006-2010), que se recurre a la inteligencia técnica y humana para golpear a las Farc.
“Las Farc comienzan a recibir golpes sin combatir, gran parte de las fuerzas insurgentes perdieron la vida sin combatir. Un chip, un avión, una bomba y destruía una unidad insurgente de tamaño importante”, dijo Medina Gallego en una intervención a finales del año pasado en Tame, Arauca.
Las sucesivas derrotas militares propinadas por los bombardeos fueron introduciendo cambios en la vida cotidiana de los frentes. Análisis internos del Bloque Iván Ríos, que opera en Antioquia, Córdoba y Chocó, realizados en septiembre de 2013, muestran hasta dónde han sido afectados. En un documento de esta unidad de las Farc, conocido por VerdadAbierta.com, revela que la intensidad de sus ataques se redujo “por las nuevas tecnologías utilizadas por el enemigo” y dejan claro que toda acción armada debe ser “en tiempo corto, no dando tiempo a las reacciones del apoyo aéreo”.
Una mirada a la historia muestra que uno de los primeros bombardeos de gran significado estratégico fue el realizado en ejecución de la Operación Colombia el 10 de diciembre de 1990 a Casa Verde, zona rural del municipio de La Uribe, Meta, un campamento central de las Farc, donde operaba el secretariado de ese grupo armado, su máximo órgano de decisión. Sin embargo, para aquellos años, según diversas fuentes documentales, esas acciones aéreas se ejecutaban en apoyo a las fuerzas desplegadas en tierra y tenían más impacto psicológico que real. En aquella ocasión se arrojaron 186 bombas.
Uno de los mayores problemas que afrontaban las operaciones aéreas durante buena parte de la década del noventa fue la cercanía de áreas habitadas por donde se movían las células guerrilleras, lo que generaba un alto riesgo de afectar a la población civil. Un ejemplo de esas afectaciones es lo ocurrido en el caserío Santo Domingo, del municipio de Tame, en Arauca, el 13 de diciembre de 1998.
Ese día se perseguía a una columna de las Farc que había atentado contra el oleoducto Caño Limón-Coveñas, cerca del poblado, y en su retirada, ingresaron al caserío, buscando camuflarse entre los pobladores. Un rato después se escuchó una gran explosión que dejó 17 personas muertas, entre ellas varios menores de edad. Si bien, la jefatura de la Fuerza Aérea Colombiana (FAC) declaró que los guerrilleros habían detonado una bomba, lo que se comprobó después fue que sobre el caserío se arrojó una bomba tipo racimo desde una aeronave. Por este caso hay varios oficiales condenados.
La modernización aérea comenzaría en 2001, cuando se incorporan a las aeronaves Kfir y Mirage sistemas de visión nocturna y de direccionamiento de las bombas, convirtiendo a Colombia en el primer país de América Latina en adquirir este tipo de instrumentos para combatir una guerrilla que adelantaba por lo menos el 80% de sus operaciones en la noche.
Una segunda oleada de bombardeos se presentó una vez se rompieron los diálogos del gobierno presidido por Andrés Pastrana y las Farc que se venían sosteniendo en San Vicente del Caguán, para lo cual se habían despejado 42 mil kilómetros como muestra de confianza para buscar una salida negociada a la confrontación armada con ese grupo subversivo. Las conversaciones se rompieron a raíz del secuestro de un avión de pasajeros el 20 de febrero de 2002.
Ese hecho llevó al gobierno a recuperar la zona del Caguán, como era conocida, y se recurrió a bombardear varios campamentos de las Farc utilizado para ello 31 aviones, entre Mirage, Kfir, A-37, T-37, AC-47, OV-10 Bronco y los Embraer Tucano, que fueron adquiridos a mediados de la década pasada. En esa época se lanzó por primera vez una bomba guiada por láser tipo Griffin.
Los aviones, junto a una sofisticada tecnología satelital, hicieron que los bombardeos se volvieran precisos, silenciosos, y devastadores en su capacidad de fuego. Testimonios de guerrilleros que han sobrevivido a ellos los describen como una luz que lo ilumina todo de repente, pues suelen ocurrir en la noche, y al que es difícil escapar. La onda expansiva es tan brutal que puede arrancar de un tajo los órganos de las personas, o sus extremidades. Por eso las Farc califican esta arma de “monstruosa” y admiten que les “han hecho tanto daño”.
Acciones áreas claves
En una nueva fase de confrontación, tal como lo reseñó Medina Gallego, las acciones aéreas contra posiciones de las Farc fueron minando los principales cuadros de la organización insurgente. VerdadAbierta.com refiere, en una línea de tiempo, los bombardeos que tuvieron más impacto en el conflicto armado.
2 de septiembre del 2007
Miembros del Ejército, de la Fuerza Aérea, de la Armada Nacional y agentes del DAS desplegaron la operación ‘Sol Naciente’ en la que, tras un intenso bombardeo, murió Tomás Medina, alias el ‘Negro Acacio’, junto a otros 16 guerrilleros, en zona selvática del Guaviare. ‘Acacio’ controlaba el tráfico de cocaína en las selvas de Vichada, Vaupés y Guaviare, y manejaba gran parte de las finanzas del grupo guerrillero.
1 de marzo de 2008
En un operativo conocido como ‘Operación Fénix’, la Fuerza Aérea Colombiana bombardeó, en territorio ecuatoriano, el campamento de Luis Édgar Devia, alias ‘Raúl Reyes’, para ese entonces el segundo jefe más importante del secretariado de las Farc. En el ataque murieron 21 guerrilleros más.
21 de julio de 2008
En medio de una operación conocida como ‘Gibratal’, coordinada por la Policía y el Ejército, se bombardearon los campamentos de los frentes sexto y 30 de las Farc en Corinto, Cauca. En la operación murió Luis Carlos Ramos Pineda, alias ‘Dago’, jefe de logística y finanzas del frente sexto de las Farc.
16 de diciembre de 2009
En un operativo conjunto, la Fuerza Aérea y la Policía Nacional bombearon un campamento del frente noveno de las Farc en el oriente antioqueño, donde murió e Rubén Darío García Gómez, alias ‘Danilo’, quien de acuerdo con las autoridades era el jefe de este frente guerrillero.
30 de marzo de 2010
En límites de los departamentos de Tolima y Quindío, murió Ciro Gómez Rayo, alias ‘Enrique Zúñiga’, comandante del Frente 50 de las Farc, Ciro Gómez Rayo, alias Enrique Zúñiga, y otros seis guerrilleros más. Su campamento fue bombardeado en un operativo de la Policía y la Fuerza Aérea Colombiana.
20 de septiembre del 2010
En un bombardeo en el municipio de San Miguel, Putumayo, murió Sixto Antonio Cabaña Guillén, alias ‘Domingo Biojó’, jefe político del frente 48 de esa guerrilla. También otros 22 guerrilleros.
23 de septiembre del 2010
El jefe militar y segundo al mando de las Farc, Víctor Julio Suárez Rojas, alias ‘Jorge Briceño’ y ‘Mono Jojoy’, murió durante un bombardeo de las Fuerzas Militares a su campamento en zona selvática de La Macarena, en el Meta. En la operación conocida como Sodoma murieron siete guerrilleros más.
4 de noviembre de 2011
‘Operación Odiseo’ fue el nombre que las fuerzas militares le dieron al bombardeo que terminó con la vida de Guillermo León Sáenz, alias ‘Alfonso Cano’. En el operativo murieron también alias ‘El Zorro’, encargado de las telecomunicaciones de la guerrilla, y alias ‘Patricia’, la compañera sentimental de Cano, además fue capturado su jefe de seguridad, ‘El Indio Efraín’.
28 de marzo de 2012
La Fuerza Aérea bombardeó uno de los campamentos principales del bloque Oriental de las Farc, en Vista Hermosa, Meta, donde murieron seis jefes de diferentes frentes de este bloque guerrillero, entre ellos Alias ‘Arsecio Niño’, primer cabecilla del frente 27, y alias ‘Marrano’ o ‘Gildardo’, responsable del asesinato de tres indigenistas estadounidenses en 1999, en Arauca.
31 de enero de 2013
En un bombardeo coordinado por la Policía y las Fuerzas Militares en el Nudo del Paramillo, murió Luis Carlos Úsuga Higuita, alias ‘Jacobo Arango’, jefe del frente V de las FARC y miembro del estado mayor del Bloque Iván Ríos. En el ataque murieron otros cinco guerrilleros.
26 de agosto de 2013
La Fuerza Aérea, con información de la Policía, ubicó y bombardeó un campamento perteneciente al frente 57 de las Farc en la vereda La Nueva de Riosucio, Chocó. El resultado fue la muerte de Virgilio Antonio Vidal Mora, alias ‘Silver’, cabecilla de este frente y quien era considerado un hombre clave para el tráfico de drogas y armas en esa zona.
19 de enero de 2014
A causa de un bombardeo contra un campamento guerrillero en la vereda Las Nubes del municipio araucano de Puerto Rondón murieron 14 integrantes de la denominada columna móvil Alfonso Castellanos y otro guerrillero fue capturado.