“La verdad no solo se cuenta en estrados judiciales”: Defensoría

      
La entidad hizo un llamado a investigadores judiciales, fiscales y jueces para que no centren la verdad sólo en las versiones de los victimarios.

relatos victimasEl proyecto Narrativas Visibles fue creado en la Defensoría del Pueblo en 2008. Foto: Semana

La verdad de lo sucedido durante el conflicto en los últimas décadas no sólo pasa por los estrados judiciales; las víctimas también tienen sus versiones y escucharlas y saber de ellas es una manera de humanizarlas.

Así lo conceptuó la Defensoría del Pueblo ante magistrados y fiscales de Justicia y Paz, tras considerar que las confesiones de ex paramilitares y ex guerrilleros son insuficientes para entender lo ocurrido durante años de guerra.

Las apreciaciones de esta agencia del Ministerio Público están respaldadas por el proyecto Narrativas Visibles, que acompaña a vìctimas desde el 2008 de los departamentos del Meta, Vichada y Norte de Santander. A través de talleres de reconstrucción colectiva, psicólogos de la entidad impulsan la idea de sean ellas mismas las que hagan un relato escrito de los homicidios, desapariciones de sus seres queridos, desplazamiento y amenazas que han sufrido.

Como resultado de su trabajo este año publicaron el libro Hasta Cuándo, en el que se compilan 52 testimonios en su mayoría de mujeres madres cabeza de familia. (descargar libro). En 2010 divulgaron el libro La historia detrás de estos ojos, con de 96 historias de habitantes del Meta (descargar libro).

Este proyecto surge como un contrapeso a las verdades que los ex paramilitares o ex guerrilleros cuentan en las versiones libres dentro de los procesos de aplicación de la Ley 975, conocida como de Justicia y Paz, con el fin de construir lo que llaman una verdad balanceada de lo sucedido durante el conflicto armado.

La iniciativa fue presentado a los magistrados y los fiscales de Justicia y Paz en Bogotá, luego de que las víctimas de las Autodefensas de Meta y Vichada, también conocidas como ‘Carranceros’, tuvieran un encuentro con sus victimarios (ver: ¿Qué reclaman las víctimas de los Carranceros?).

Wilson Chavarro, director del proyecto, dijo ante los magistrados que “la verdad que necesitan las víctimas, no la podemos reducir a la verdad de los estrados judiciales, allí se pierde la humanidad de quienes vivieron los hechos”. Agregó que a partir de la información que entregan los postulados es imposible reconstruir la historia de un ser querido y humanizar a la víctima.

Chavarro se refirió a algunos casos que han sido documentados por la Unidad de Justicia y Paz a partir de los testimonios de los desmovilizados. José Baldomero Linares, alias ‘Guillermo Torres’, jefe de este grupo paramilitar, ha dicho en múltiples oportunidades que asesinó a cientos de personas solo porque le llegaba información de que supuestamente a víctima compartía información con la guerrilla, con el Ejército o porque estaba consumiendo drogas.

En muchos de estos casos los jefes paramilitares que hoy están versionando en el proceso de Justicia y Paz no conocieron a las víctimas, por eso su versión de los hechos se resume a lo que unos terceros dijeron de ellas. Sus familiares no solo han desmentido las versiones de los ex paramilitares, sino que con sus relatos han abierto nuevas posibilidades de interpretación y le han dado un rostro a las cifras que judiciales.

“Los importante es saber que detrás de ese expendedor de droga o de esos supuestos informantes, hay un historia y una familia que sufrió con sus asesinato”, agregó Cahavarro.

(Haga clic en las imágenes para conocer algunas de las historias recopiladas en el libro Hasta Cuándo.)

Haga clic sobre alguna imagen para conocer más historias de víctimas

Recomendaciones para los encuentros con los victimarios
Para abrir nuevos espacios de participación a las víctimas, los magistrados de Justicia y Paz han decidido trasladarse a las regiones más afectadas por el grupo armado durante los primeros días de las audiencias de Identificación de las afectaciones causadas, un espacio judicial previo a la sentencia en el que las victimas hacen sus reclamos de verdad, justicia y reparación.

Sin embargo, en casos como la audiencia contra los ‘Carranceros’, varias víctimas aseguraron que eran muy difícil a acudir a este tipo de audiencias porque no querían recordar lo sucedido y que les costaba encontrarse de frente con los victimarios. Sin embargo, a pesar de no estar preparadas para el encuentro, muchas personas llegaron a la audiencia porque lo consideran un requisito para la reparación.

Sobre este hecho Chavarro aseguró que para la superación de este evento traumático es necesario que las víctimas recuerden, pero que el problema radica en cómo lo tienen que hacer. Lo primero es que sepan que sus asistencia no es obligatoria y que si no quieren no tienen que dirigirse al victimario.

Si deciden hacerlo deben contar con la ayuda de un grupo de profesionales que le advierta sobre los efectos de esta decisión.