Tania Guzmán asegura que el problema, como venía funcionando la asignación de regalías, se centraba en que los entes territoriales no presentaban proyectos que atendieran las necesidades de las comunidades más vulnerables porque, en algunos casos, no tenían una adecuada asistencia técnica.
Ha pasado un mes desde los hechos ocurridos en Los Pozos, inspección del municipio de San Vicente del Caguán, Caquetá, en el que 74 policías fueron retenidos contra su voluntad por cientos de manifestantes campesinos de Meta, Caquetá y Guaviare.
Desde inicios de este año, los labriegos exigían a la petrolera china Emerald Energy la inversión en sus territorios por las actividades petroleras que realizan en el bloque Ombú, ubicado entre los municipios de San vicente del Caguán (Caquetá) y La Macarena (Meta). Fue allí, en el campo petrolero Capella, que los enfrentamientos con efectivos de la Unidad Nacional de Diálogo y Mantenimiento del Orden (UNDMO, antiguo ESMAD) dejó un campesino y un policía muertos.
VerdadAbierta.com reconstruyó cómo el enfrentamiento entre campesinos y Fuerza Pública fue una tragedia que escaló paulatinamente, y que el gobierno nacional pudo evitar si hubiera atendido a tiempo los reclamos de los voceros de las comunidades campesinas. (Leer más en: Estallido social en Los Pozos: expresión de años de reclamos desatendidos)
Sin embargo, la piedra angular del estallido es la inversión social en los municipios de Caquetá y Meta, en los que Emerald Energy realiza actividades de producción petrolera. Las comunidades reprochan que, por años, la riqueza que han extraído de sus territorios no les ha sido compensada de manera efectiva.
Actualmente, el marco normativo vigente que regula el funcionamiento del Sistema General de Regalías (SGR) se rige por la Ley 2056 del 2020, que establece que las bolsas con las que funciona el SGR pasan de llamarse “fondos”, como lo establecía la ley de 2017 que creó el Sistema, a “asignaciones”.
La Asignación para la Inversión Regional es el equivalente al antiguo Fondo de Desarrollo Regional y el antiguo Fondo de Compensación Regional ahora se conoce como Asignaciones Directas y de la Asignación para la Inversión Local, este último dirigido a compensar a los municipios productores, como es el caso de San vicente del Caguán y La Macarena.
En el régimen legal del SGR se precisa que los departamentos, municipios y distritos en cuyo territorio se adelanten explotaciones de recursos naturales no renovables “tendrán derecho a participar en las regalías y compensaciones, así como a ejecutar directamente estos recursos” para aumentar la competitividad y mejorar las condiciones socioeconómicas de la población.
VerdadAbierta.com conversó con Tania Guzmán Pardo, subdirectora General del Sistema General de Regalías (SNR) del Departamento Nacional de Planeación (DNP) para conocer cómo ha venido operando la inversión de regalías y los ajustes que la nueva administración en cabeza del presidente Petro está tomando.
Los recursos de las regalías no han escapado a escándalos de corrupción. El más reciente afectó, también, a la implementación del Acuerdo de Paz. En diálogo con este portal, Guzmán se refirió a las “dificultades” que tuvieron los recursos del OCAD PAZ –una de las tres vías de financiación de proyectos mediante regalías– en la administración del expresidente Iván Duque Márquez.
El OCAD PAZ es una de las bolsas del SGR destinado para inyectarle recursos a proyectos formulados en los 170 municipios que hacen parte de los Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial (PDET). Se tratan de territorios afectados históricamente por la guerra, los cultivos de uso ilícito, la pobreza y la ausencia del Estado. San Vicente del Caguán y La Macarena son dos de esos 170 municipios PEDT.
A mediados del año pasado, periodistas de Blu Radio recogieron denuncias anónimas de varios alcaldes que aseguraban que los proyectos que presentaban para el desarrollo en sus territorios estaban siendo condicionados por pagos previos a funcionarios. Según las quejas , para que un proyecto llegara a una sesión de OCAD PAZ —cuya secretaría técnica estaba a cargo de Álvaro Ávila Silva, entonces director del Sistema General de Regalías del DNP, y en la que se verifica que se cumplan los requisitos de regalías—, “necesitaba tener un padrino y, por tanto, pagar entre 6 % y 15 % de dádivas”.
Según la actual oficina de la Subdirección, desde 2012 al 15 de febrero de 2023, sólo en San Vicente del Caguán, se han aprobado 33 proyectos de inversión por valor de $48 mil millones con recursos del Sistema General de Regalías: “25 proyectos por valor de $24.856 millones fueron aprobados en su oportunidad con cargo a las fuentes del fondo de Desarrollo Regional y fondo de Compensación Regional, en los sectores de educación, transporte, deporte, minas y cultura”. De estos, 23 proyectos se encuentran en estado terminado.
VerdadAbierta.com (VA): En menos de un año ocupando el cargo de subdirectora General del Sistema General de Regalías (SNR) del DNP, ¿cómo observa la inversión de regalías por la actividad petrolera que desde 2012 se ha realizado en el país?
Tania Guzmán (TG): Yo empecé como subdirectora General de Regalías en noviembre del año 2022 y hemos estado analizando con mucho detenimiento cómo ha funcionado el Sistema y qué ha pasado.
En esta administración en particular hemos tenido el foco en cómo mejorar el impacto de los proyectos y cómo tener proyectos de naturaleza más estratégica. Hemos identificado que hay una fuerte dispersión de los recursos. Los recursos se invierten de pequeño monto y no tienen el impacto que deberían tener.
Para eso, lo que hemos estado trabajando es en mejorar todo el sistema de la asistencia técnica integral. Esa asistencia técnica integral que se brinda a las entidades territoriales, municipios y departamentos del país, tal vez tenía tres problemas fundamentales.
Uno, era una asistencia técnica muy centrada en lo procedimental, en cargar información en aplicativos. Nosotros queremos avanzar y estamos avanzando en una asistencia técnica mucho más sustantiva, que le permita a departamentos y municipios ser capaces de identificar, en dónde están los problemas y de qué manera se podría cerrar las brechas.
Un segundo problema que tiene la asistencia técnica como se hacía era una asistencia técnica hecha por demanda, es decir, el DNP se sentaba a esperar que le preguntaran y le pidieran ayuda. Lo que nosotros queremos es cambiar ese sistema por demanda hacia un sistema por oferta, es decir: ofrecer, poner más cerca de las entidades territoriales, esa asistencia técnica para mejorar esas capacidades.
Y había un tercer problema, que era una asistencia técnica centralizada, es decir, la mayoría de la gente estaba en Bogotá, aún cuando el Sistema General de Regalías tiene siete oficinas territoriales. Nosotros estamos avanzando hacia un fortalecimiento de esa asistencia técnica mucho más descentralizada.
VA: Por años, VerdadAbierta.com ha recogido múltiples testimonios de diversas comunidades del territorio nacional que manifiestan que la riqueza que sale de sus regiones no ven que regrese para mejorar sus condiciones socioeconómicas, ¿qué opina de esto?
TG: En la valoración que nosotros hemos estado haciendo lo que vemos es que no hay suficientes proyectos de impacto, proyectos que le apunten a resolver problemas estructurales, tanto a nivel municipal como incluso a nivel regional.
La gente tiene razón cuando ve que hay riqueza en su territorio, riqueza que genera regalías, pero al mismo tiempo no ve que eso se refleje adecuadamente en los bienes y servicios de sus territorios. Por ello estamos trabajando en el Departamento Nacional de Planeación, porque esa percepción y esa realidad, sobre todo, cambien.
VA: ¿Cómo es el trámite oficial para que se hagan obras en territorio mediante regalías?
TG: Hay diferentes fuentes de recursos y esas diferentes fuentes de recursos se utilizan de diferente manera. Tenemos unas asignaciones de recursos de naturaleza regional, tenemos unas asignaciones de recursos que se asignan a los municipios productores y hay unas fuentes de recursos que se asignan a los municipios más pobres.
Estamos trabajando en el DNP concentrados en tres fuentes fundamentales para tratar de mejorar el impacto de las inversiones: una fuente es la de Ciencia Tecnología e Innovación, estamos avanzando hacia que los actores del sistema identifiquen los temas de ciencia, tecnología e innovación a nivel departamental que pueden producir mayor impacto y que pueden cerrar las brechas.
La segunda fuente importante se llama Asignación para la Inversión Regional. Es decidida por los departamentos, fundamentalmente, y los OCAD (Órgano Colegiado de Administración y Decisión) regionales. Ahí estamos trabajando para que la metodología de la asignación de esos recursos ayude a que la inversión sea, efectivamente, de impacto regional, para que tratemos de acabar la dispersión en los proyectos chiquiticos que no tienen tanto impacto.
Y la tercera de las fuentes en las que estamos concentrando la atención es en la asignación para la paz del OCAD PAZ, que tuvo, como es conocido, dificultades y estamos avanzando con una metodología que permita corregir parte de los problemas que se presentaron con la asignación para la paz y que produjo una concentración de recursos en muy pocas regiones.
VA: ¿Qué pasó en el caso de la inspección de Los Pozos, San Vicente del Caguán, en donde los campesinos le pidieron inversión directamente a la petrolera y no al gobierno nacional?
TG: La decisión de aprobación de un proyecto le corresponde a la entidad territorial. Es decir, el Municipio tiene la autonomía porque así ha sido establecido desde la ley 2056 y la reforma constitucional más reciente. Es el Municipio al que le corresponde la toma de la decisión.
Entonces, el Sistema General de Regalías, en cabeza del Departamento Nacional de Planeación, lo que hace es ayudar a la ejecución de las asignaciones. El DNP no decide. Quién decide sobre las asignaciones son los entes territoriales. ¿Qué es lo que sí le interesa el DNP y en lo que estamos comprometidos? En ayudar en la toma de esas decisiones y en la estructuración de esos proyectos, para que los proyectos correspondan a las necesidades sentidas de la población
Lo que hace en este caso el DNP según sus funciones es acompañar el proceso de estructuración de los proyectos a través de esta asistencia técnica y una vez aprobados los proyectos por el ente territorial, lo que hace el DNP es acompañar la ejecución de los proyectos.
Las comunidades, por supuesto, deben dirigirse a los entes territoriales que son los que toman la decisión.
VA: ¿El DNP tiene conocimientos si las comunidades ya le habían solicitado a la alcaldía de La Macarena y San Vicente del Caguán o a la gobernación de Caquetá y Meta la construcción de la vía San Vicente – La Macarena, que es la piedra inicial de los reclamos?
TG: No. No tenemos esa información en detalle porque a nosotros nos llega en el momento en que el proyecto ya está estructurado. El Departamento Nacional de Planeación interviene en el proceso en que el proyecto está estructurado y que llega bien sea a los OCAD de naturaleza regional para que allí se apruebe el proyecto presentado por el ente territorial.
VA: Por eso es clave lo que señalaba al respecto de la necesidad de identificar de manera más asertiva las necesidades de las comunidades en territorios.
TG: Así es. Nosotros en esta administración empezamos a reflexionar sobre todos estos temas y lo que hemos identificado es que uno de los puntos centrales es la asistencia técnica integral. Ahí hay un aspecto fundamental en el cual se puede incidir y estamos trabajando en ello para modificar y fortalecer esa asistencia técnica de manera que los proyectos correspondan de mejor manera a lo que necesita la población.
VA: ¿A cuánto ascienden los pagos por regalías que han generado las actividades petroleras de Emerald Energy para el país desde su operación?
TG: No es en la Subdirección General de Regalías del DNP la que tiene esa información.
¿Cómo funciona el sistema? Las empresas petroleras, extraen, etcétera, y toda esa parte que tiene que ver con la generación de las regalías le corresponde al Ministerio de Minas y Energías, que es el que hace toda la revisión y el que establece cuánto extrae y cuántos son las regalías.
Ya al Departamento Nacional de Planeación nos llega es la cuenta final, el presupuesto, que en este caso es en bienios, en este caso es el biennio 2023-2024
Esa información puntual no podríamos darla desde la Subdirección General de Regalías, tendría que ser consultada con el Ministerio de Minas y Energías que es el que hace la verificación de eso.
VA: ¿Es posible determinar cómo se han invertido las regalías que ha producido Emerald Energy en los recursos de la Asignación Directa y de la Asignación para la Inversión Local?
TG: No porque yo tengo una bolsa. Lo que le llega a la subdirección General de Regalías es una bolsa que en este bienio 2023-2024 asciende a 31 billones de pesos. Y una vez dentro de la bolsa se hace la distribución dentro de las diferentes fuentes. Entonces, tampoco podría ser el sistema el que indique cuántas regalías ha producido la empresa en particular y cuántos de esos dineros se han invertido.
Es casi imposible, porque como los recursos lo que hacen es entrar en la bolsa general y una vez en la bolsa general lo que hace es la distribución de esa bolsa general en las diferentes fuentes, independientemente de qué empresa los produjo.