Este exjefe paramilitar está próximo a salir de la cárcel y a tener casa por cárcel, pues de acuerdo con sus representantes legales, ya cumplió con los requisitos exigidos por la Ley de Justicia y Paz, entre ellos, la pena alternativa de ocho años de prisión. Aunque su futuro se desconoce, muchos advierten que retornará a la zona donde alguna vez fue ‘dios’ y ‘ley’: Necoclí.
Una extraña mezcla de expectativa, preocupación e indignación es lo que se respira por estos días en el municipio de Necoclí, norte del Urabá antioqueño. Y no es para menos. De no ocurrir nada extraordinario, en las próximas semanas Fredy Rendón Herrera, alias ‘El Alemán’, quien fuera máximo comandante del Bloque Elmer Cárdenas (BEC), estructura paramilitar que en el pasado reciente dominó a sus anchas los municipios de influencia del Golfo de Urabá, recibirá el beneficio de casa por cárcel como parte de los beneficios de la Ley de Justicia y Paz. (Ver: ‘El Alemán’, el primer ‘peso pesado’ condenado en Justicia y Paz)
De acuerdo con sus abogados, Rendón Herrera ya cumplió con los requisitos exigidos en esa norma de justicia transicional; esto es, haber contribuido con el esclarecimiento histórico de la verdad, colaborado con la justicia, reparado a sus víctimas y purgado una pena alternativa de ocho años de reclusión en una cárcel. Así lo reconoció el magistrado con función de control de garantías de Justicia y Paz de Medellín, Olimpo Castaño, quien en audiencia celebrada el pasado 12 de marzo ordenó sustituir la medida de detención carcelaria por detención domiciliaria. La decisión final, no obstante, dependerá de lo que determine una juez de ejecución de penas de Bogotá.
Aunque no se conocen los planes del exjefe paramilitar una vez salga de la cárcel, todos especulan que su destinó estará en el que fuera su fortín militar, político y social: Necoclí. De hecho, en entrevista concedida a VerdadAbierta.com, en abril de 2014, Rendón Herrera declaró que llegaría a la región a contribuir con la búsqueda de personas desaparecidas. (Ver: ‘El Alemán’ dice que saldrá a buscar desaparecidos).
Es por eso que en este pueblo de playas blancas, bañadas por el mar Caribe, su presencia no pasará inadvertida ni para las autoridades, ni para los desmovilizados y mucho menos para las cientos de víctimas que dejaron los hombres bajo su mando en el Urabá antioqueño y chocoano.
Según Alicia Ramos Pacheco, dirigente de Tierra y Vida capítulo Urabá, organización que acompaña y asesora a campesinos víctimas del despojo de tierras, entre las víctimas que dejó la violencia paramilitar ejercida por los paramilitares pertenecientes al BEC no deja de despertar preocupación que uno de sus mayores victimarios regrese a la región.
“Lo triste es que sale este señor y muchos de los casos de homicidios y desapariciones siguen sin resolverse”, declara la líder y agrega: “los casos de tierras, por ejemplo, siguen ahí, sin que se les dé salida. Y en varios casos, los responsables son los hombres del ‘Alemán’. Por eso es que nos causa indignación y a la vez preocupación, porque muchos de sus hombres siguen en las mismas”.
Todavía “le copian”
En la población desmovilizada la posible llegada del ‘comandante Alemán’ a la región despierta muchas expectativas. De acuerdo con la Agencia Colombiana para la Reintegración (ACR), a la fecha unos 320 desmovilizados de las Autodefensas Unidas de Colombia (Auc) residen en los cuatro municipios del norte del Urabá antioqueño: Necoclí, Arboletes, San Juan y San Pedro de Urabá.
Si bien un número importante de ellos perteneció al BEC, otro tanto militó en estructuras paramilitares de otras regiones del país y regresaron a sus lugares de origen una vez desmovilizados. Para Marcial Bejarano, coordinador de la oficina de la ACR con sede en Apartadó, la posible llegada a la región de un personaje como ‘El Alemán’ podría incidir en el proceso de reintegración que adelantan actualmente los excombatientes de esa estructura paramilitar.
“No se puede desconocer que el señor Rendón Herrera sigue siendo un referente y una figura para los desmovilizados y si viene a la zona, obviamente él puede cambiar, de pronto no el proceso de reintegración, pero sí puede incidir en los grupos participantes. No estoy diciendo que sea negativo o positivo, pero es algo que no podemos desconocer”, manifiesta Bejarano.
Pese a que han transcurrido casi nueve años desde la dejación de armas por parte del BEC, muchos de sus integrantes aún lo sienten como ‘su comandante’, asegura el funcionario: “uno los oye hablar y se refieren a él como ‘el patrón’, como ‘el don’. Ahora, nosotros esperaríamos que esa influencia sea más positiva que negativa. Él está adelantando un proceso serio con el Estado, tanto es que no está extraditado, entonces siento que es un tipo que tiene que llegar a aportar cosas más positivas. Aunque uno no puede cerrar la mente a que puedan pasar otras cosas”.
Agencias internacionales han seguido este asunto. “El imaginario de que los grandes jefes de los grupos ilegales todavía siguen siendo los ‘benefactores’ de la zona es aún muy fuerte en la zona. Muchas autoridades ven con indignación que ese imaginario no haya cambiado”, señala un informe confidencial de una de esas agencias conocido por VerdadAbierta.com.
“El comando ‘Alemán’”
No son erradas las apreciaciones del funcionario de la ACR ni lo percibido por observadores internacionales. En lo profundo de Vale Adentro, una vereda de Necoclí donde la vegetación es escasa y la tierra se cuartea debido al intenso calor, vive Diana*, desmovilizada del BEC que pasa sus días prodigándole cuidados a su madre, su pequeña hija de tres años y a su mascota, un perro de raza Rottweiler.
Diez años atrás, cuando apenas era una niña de 14 años, fue reclutada por hombres de ‘El Alemán’ que la sedujeron con la posibilidad de ganar algo de dinero y forjar su proyecto de vida en las Autodefensas. “Simplemente me dijeron que si me quería ir con ellos y dije que sí”, recuerda Diana, quien por su corpulenta figura terminó en muy poco tiempo formando parte del anillo de seguridad de ‘El Alemán’.
Esa cercanía forjó un cariño mutuoque aún hoy se mantiene. “Cuando el ‘comando Alemán’ vino el año pasado con los magistrados de Justicia y Paz fui y lo saludé. Se alegró de verme y me preguntó que cómo me estaba manejando. Para mí, sería muy bueno que volviera a la región, que volviera a trabajar con nosotros, pero esta vez en proyectos productivos. Porque a pesar de todo lo que se dice, la gente también tiene que reconocer que hizo cosas buenas por este pueblo”, señala.
Sentimiento similar expresa Jairo*, quien trece años atrás patrullaba en los municipios de Dabeiba y Mutatá bajo las órdenes de Elkin Jorge Castañeda, alias ‘Hermógenes Maza’, uno de los lugartenientes de ‘El Alemán’. En su tono no se advierte ninguna duda cuando afirma que nunca más volverá a empuñar un arma. Pero tampoco oculta su gratitud por el ‘comandante Alemán’.
Jairo vive en Techos Verdes, un barrio de no más de cinco manzanas ubicada en medio de la nada, varios kilómetros a las afueras del casco urbano de Necoclí sobre la margen derecha de la troncal que conduce a los municipios costeros de San Juan de Urabá y Arboletes.
Además de contar con la particularidad de que todas sus casas tienen el techo pintado de un verde limón que brilla con intensidad en las horas que el sol golpea con toda su furia, los pobladores de Necoclí se refieren a esta urbanización como “el barrio del Alemán”. En efecto, meses antes de que el BEC hiciera dejación de sus armas, el máximo jefe de esta estructura paramilitar, Rendón Herrera ordenó construir estas viviendas para que sus hombres, una vez en la vida civil, contaran con una casa digna.
Allí viven por lo menos 40 desmovilizados que no solo intentan borrar con trabajo legal su pasado en armas sino que, además, conviven con familias que nunca en la vida empuñaron un arma. Jairo trata de sacar adelante un proyecto de 100 hectáreas de caucho que beneficiará a 25 familias, entre ellas varias integradas por excombatientes de las Auc.
No ha sido tarea fácil para Jairo. Los problemas de convivencia con las demás familias, la falta de planeación, sumada a la indisciplina y la impaciencia de sus antiguos compañeros de armas, han puesto en jaque en más de una ocasión el proyecto. Quizás por ello afirma que la posible llegada del ‘comandante Alemán’ a la región podría ayudar a sacar adelante varios proyectos productivos que vienen siendo ejecutados por población desmovilizada con muy cuestionable éxito.
“Si el comandante ‘Alemán’ llega a la región sería muy bueno y ojalá que llegue a organizar proyectos que no marchan, algunos que incluso él dejó en marcha antes de desmovilizarse” responde Jairo, quien no vacila en afirmar que “me gustaría trabajar otra vez con él”.
El Urabá que encontrará ‘El Alemán’
Algo claro tienen los habitantes tanto de Necoclí como demás municipios donde el BEC tuvo una fuerte injerencia: éste no es el Urabá de los tiempos del ‘Alemán’. La historia muestra que el vacío de poder que dejó su desmovilización rápidamente fue llenado por una estructura armada liderada por su hermano, Daniel Rendón Herrera, alias ‘Don Mario’, quien reclutó antiguos combatientes de las Auc para conformar lo que hoy son las llamadas ‘Autodefensas Gaitanistas de Colombia’, conocidas también como ‘Urabeños’ y ‘Clan Úsuga’.
Sin el discurso contrainsurgente que caracterizó a ‘El Alemán’, su hermano Daniel centró toda su atención en controlar el corredor estratégico para narcotráfico que tuvieron los paramilitares en el norte de Urabá. Y aunque ‘Don Mario’ fue capturado en abril de 2009, los hombres en armas rápidamente se reacomodaron, se adaptaron al contexto de persecución policial, crecieron y se fortalecieron bajo las órdenes de dos hombres curtidos de la guerra: los hermanos Juan de Dios y Dairo Antonio Úsuga David, exguerrilleros del Epl, quienes expandieron y consolidaron esa estructura armada y la convirtieron en la principal amenaza para la seguridad de la región y del país.
Su poder quedó demostrado en enero de 2012. El comercio y el transporte de por lo menos 100 municipios de Chocó, Antioquia, Córdoba, Sucre, Bolívar y Magdalena cesaron actividades por órdenes de los ‘Gaitanistas’, como represalia por la muerte de Juan de Dios, alias ‘Giovanni’, quien fue dado de baja por efectivos de la Policía en operativo que tuvo lugar en el municipio chocoano de Acandí, el 31 de diciembre de 2011.
Los ‘Gaitanistas’ se constituyeron en el principal enemigo de las fuerzas de seguridad del Estado. El pasado 3 de febrero el gobierno nacional desplegó, en todo el Urabá antioqueño, la operación Agamenón, donde 1.200 policías y 1.000 militares asignados a la recién creada Fuerza de Tarea Neptuno con el objetivo de destruir el imperio que Dairo, más conocido como ‘Otoniel’, ha construido a punta de terror en los municipios del norte de Urabá y el llamado Eje Bananero.
Si bien las autoridades civiles y militares al mando de este gigantesco operativo han reportado golpes contundentes contra esta estructura, como la captura de 37 importantes ‘Gaitanistas’ y la incautación de 250 kilos de cocaína en zona rural de Necoclí, líderes de la región reconocen el poder de intimidación y control sobre poblaciones campesinas que ha alcanzado esta estructura criminal.
Documentos confidenciales de agencias internacionales conocidos por VerdadAbierta.com que dan cuenta de la valoración que han hecho sobre el eventual retorno de exparamilitares como Rendón Herrera a la región del norte de Urabá a asentarse en sus propiedades, indican que si bien es esperado por sus antiguos subordinados, existe la probabilidad de que quienes tienen hoy el control territorial “no permitan que regresen estos antiguos jefes a usufructuar esas propiedades cuando a los actuales jefes de las bandas criminales les ha correspondido en estos últimos años enfrentar la guerra que les declaró el Gobierno y que esta negativa a devolver los bienes pueda suponer mayor confrontación”.
Si bien aún no se sabe con certeza dónde se radicará Rendón Herrera una vez reciba el beneficio de casa por cárcel, la sola decisión de su excarcelación genera varias preguntas: ¿Introducirá nuevas tensiones si decide volver a Necoclí en momentos en que las fuerzas de seguridad del Estado libran una batalla abierta contra quienes coparon su territorioy se convirtieron en poderosos capos del narcotráfico? ¿Contará el gobierno nacional con esquemas de protección adecuados para brindarle protección a quien fuera en el pasado ‘dios’ y ‘ley’ en todo el norte de Urabá? ¿Qué tan poderosos y quienes son en realidad los enemigos de ‘El Alemán?
Solo el tiempo podrá responder esas preguntas.
* Nombres cambiados a petición de las fuentes.