Los habitantes del corregimiento Pueblo Nuevo vieron una luz en el camino, o mejor, en la vía que los comunica con la cabecera municipal de Pensilvania, tras ser reconocidos hace 19 meses por la Agencia de Renovación del Territorio (ART) como una de las Zonas Más Afectadas por el Conflicto Armado (Zomac). Pero esa chispa se apagó cuando se supo que, de los 16 kilómetros que tiene la vía, autorizaron la reparación de apenas 2,37 kilómetros.
“Que nos arreglen la vía”, coincidieron Miriam Giraldo y Fabián Medina, a quienes se sumó el conductor de bus Jaime Hurtado. Giraldo, de la vereda Alta Mira, se quejó: “Esta vía está muy fea y en invierno prácticamente desaparece”. Medina, agricultor, añadió que los accidentes, sobre todo en moto, son constantes porque el trazado es desnivelado y con curvas cerradas. Y Hurtado también se unió al lamento: “Manejar por aquí es un riesgo. Esta carretera pide arreglo a gritos”.
Las Zomac son como un premio de consolación para el departamento de Caldas luego de que ninguno de sus municipios quedara favorecido entre los 170 del país con los Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial (PDET), otro mecanismo para acceder a los dineros del posconflicto. Esto a pesar de que tiene cerca de 100 mil víctimas registradas en el Registro Único de Víctimas (RUV).
Obras por impuestos
El primer bus, como el de Jaime Hurtado, parte a las 6 de la mañana de Pueblo Nuevo para afrontar los 38 kilómetros que tiene la vía hasta la cabecera municipal. Todos los días sale con campesinos y cargado de café, plátano, caña y toda la muestra agrícola de la región.
De los 16 kilómetros que hay entre Pueblo Nuevo y Montebello, sólo existen 600 metros en material “placa huella”, unos módulos de concreto pesado que se usan para pavimentar vías rurales de poco tránsito. También hay otros 400 metros en la vereda Bajo Guayaquil y 200 en Alto Mira.
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El recién plan aprobado incluye otros 2,37 kilómetros. La inversión estará a cargo de la empresa Acesco y será de 3.900 millones de pesos, financiados a través del mecanismo de Obras por Impuestos. Es decir, las Zomac.
Las Zomac hacen parte de los mecanismos creados para la restauración de los territorios más impactados por el conflicto armado, tras el Acuerdo de Paz firmado por el gobierno del presidente Juan Manuel Santos (2010-2018) y la entonces guerrilla de las Farc. Esta estrategia quedó incluida en la reforma tributaria del 2016 y consiste en darles vía libre a los proyectos presentados por los representantes de los territorios, para que la empresa privada invierta en ellos a cambio de tarifas reducidas en el impuesto a la renta. Es decir, obras por impuestos.
Se supone que el Estado dejaría de recibir 250 mil millones de pesos por tributos a cambio de la inversión de esos dineros en la reconstrucción de vías, alcantarillados, colegios, acueductos e infraestructura energética en los territorios.
Pero con la implementación de las Zomac, el gobernador de Caldas, Guido Echeverri, está indignado: “Sacan la gran noticia que los empresarios pueden pagar impuestos con obras en zonas del conflicto. Cuando fuimos a ver son apenas 250 mil miserables millones, monto total que los empresarios pueden invertir haciendo obras por impuestos. No es nada”.
David Santamaría, director de Ejecución y Evaluación de la ART, sostuvo que parte del problema es la restricción presupuestal que hoy tiene este mecanismo, ya que tiene estimado un cupo de sólo 250 mil millones de pesos anuales para cubrir las necesidades de obras de todo el país: “Hay alta demanda de proyectos que se presentan y por eso no alcanzan a viabilizarse todos los que solicitan la vinculación y este se convierte en un gran filtro”.
A la pregunta de por qué el límite presupuestal si son recursos que aportan las empresas, Santamaría respondió que, de todos modos, se trata de recursos públicos. Es inversión en obras en vez de pagar impuestos, por esta razón se fijan “techos o topes”, y explicó que muchos proyectos “no cumplen con los requisitos y, por lo tanto, en la primera fase no quedan vinculados, aunque las regiones pueden presentar una propuesta de ajuste para que sean reconsiderados”.
En todo el país hay 62 empresas vinculadas en el primer y segundo año de implementación de las Zomac para ejecutar 65 proyectos sociales y cuentan con 467.935 millones de pesos.
En medio de la polémica, el pasado 17 de mayo llegó la buena noticia a Pensilvania. La ART aprobó el proyecto que recibirá recursos del Zomac para la pequeña vía de Pueblo Nuevo. La inversión, en definitiva, será de 3.965 millones de pesos.
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Consultado por La Patria y Consejo de Redacción, el alcalde de Pensilvania, Jesús Iván Ospina, resaltó que los recursos equivalen al 20 por ciento de los 19.300 millones de pesos que tiene el municipio de presupuesto en el 2019. Y lamentó, además, que el proceso para acceder al programa sea tan complicado: “Estábamos intentando desde el 2018. Tuvimos que pasar por muchos filtros y requisitos que exigen la ART, Planeación Nacional y el Invías”.
Paola Rincón, líder de la implementación de proyectos de obras por impuestos de la empresa Acesco, dijo que el interés es mejorar esta vía terciaria con el fin de facilitar el tránsito: “Hemos trabajado en conjunto con la Alcaldía para sacar adelante el proyecto”.
Según el alcalde Ospina, la obra arrancaría en mes y medio. Son sólo 2,37 kilómetros, pero es significativo para los habitantes de Pueblo Nuevo como Miriam Giraldo, Fabián Medina y el conductor Jaime Hurtado, quienes todos los días afrontan el tortuoso camino hasta la cabecera municipal de Pensilvania.
El malestar
“A veces presentan proyectos de sólo perfil o que no cuentan con estudios, por eso es que muchos no quedan; debe haber un acompañamiento del gobierno local y de las empresas”, explicó María Offir Jiménez, funcionaria de la Dirección de Ejecución y Evaluación de Proyectos de la ART. “Ninguna entidad estaba capacitada para recibir esa cantidad de proyectos, el problema radica en la mala formulación”.
El malestar por el rechazo de las propuestas no se ha hecho esperar en los municipios de Caldas. “Proyectos en las regiones sí hay y muchos, esa no puede seguir siendo la excusa del gobierno nacional, que no hay”, manifestó el secretario de Desarrollo Económico de Caldas, Miguel Trujillo Londoño. “Fue la zona que más proyectos presentó, cercanos a los 20 mil millones de pesos. Si los proyectos tienen problemas de forma y no de fondo deberían decirlo con tiempo para corregirlos, es absurdo que no tengamos una información clara de lo que pasó”.
El funcionario añadió que ya existía el interés de compañías como Acesco, Navesco, Agrobetania, Grupo Arme, Internalseg y Susuerte.
Un conocedor de la región, que prefirió no dar su nombre, destacó que para mover estos proyectos hace falta el apadrinamiento de un político: “Pensilvania pasó porque tenía el apoyo de Óscar Iván Zuluaga (excandidato presidencial del Centro Democrático nacido en ese municipio), los otros que no tienen apoyo se quedaron atrás”.
Consultada la ART sobre ese punto, la entidad negó que las ayudas estén direccionadas políticamente. Argumentaron que de los casi 30 proyectos presentados en el Eje Cafetero sólo tres podrían tener aprobación.
El alcalde de Belalcázar, Jahír de Jesús Álvarez, también expresó su disgusto: “No quiero culpar a nadie, pero siento que jugaron con las expectativas de un municipio y una región”. Allí se presentaron proyectos por 7.140 millones de pesos.
En el 2018, primero año de ejecución del programa Zomac, le dieron vía libre a 27 proyectos, de los cuales aprobaron 23, apadrinados por 28 empresas. Para este 2019 viabilizaron 65 y 42 tuvieron el visto bueno final, con apoyo de 42 empresas.
Ruta del trámite
En octubre del 2017 la Agencia de Renovación del Territorio (ART) dio a conocer las poblacionesclasificadas, más no priorizadas con proyectos de inversión, como Zomac. Ademásde Pensilvania, por Caldas quedaron Anserma, Belalcázar, Marulanda, Norcasia, Palestina, Riosucio, Risaralda y Samaná.
En el 2018, municipios de todo el país presentaron en total 1.110 proyectos. No obstante, es necesario pasar por varios filtros para lograr la aprobación de las iniciativas.
Para empezar, los representantes de los municipios deben radicar el proyecto ante la ART, donde le realizan un chequeo documental a la propuesta con el fin de establecer si cumplen con todos los requisitos. Tras ese primer paso, las solicitudes siguen el tránsito gubernamental y son remitidas al ministerio correspondiente. Ese trámite tiene una duración de 15 días para emitir respuesta.
Si el ministerio a cargo aprueba la documentación, el proyecto será remitido al Departamento Nacional de Planeación (DNP), entidad encargada de dar el visto bueno final. De esta manera, los proyectos se suscriben al Banco de Proyectos Zomac.
Bitácora del proceso de Calda
1. En el 2018, Caldas presentó 15 proyectos y buscó la financiación de empresas que apoyaran el proceso del programa a las Zonas Más Afectadas por el Conflicto Armado (Zomac).
2. Presentaron propuestas las alcaldías de Anserma, Belalcázar, Marulanda, Norcasia, Palestina, Riosucio, Risaralda y Samaná.
3. De los 15 proyectos presentados, 11 fueron devueltos por la ART, según ellos, por faltantes documentales. Las alcaldías no insistieron en los proyectos.
4. Los cuatro restantes, todos de Pensilvania, fueron presentados otra vez y transferidos al Ministerio de Transporte. Al revisarlos, la entidad realizó observaciones técnicas que, al cierre del plazo, no fueron subsanadas.
5. Uno de los cuatro proyectos de Pensilvania(el de placas huella) fue presentado con la documentación el 14 de marzo, un día antes del cierre, y por tiempo no alcanzó a surtir el trámite de revisión, viabilización y registro.
6. La ART reconoció que hubo un esfuerzo mancomunado de las autoridades del municipio, el Ministerio de Transporte y una empresa interesada en financiar uno de los proyectos a través del pago de impuestos. “Sin embargo dados los tiempos que tuvimos en este primer año, las observaciones técnicas del Ministerio de Transporte no fueron subsanadas en su totalidad antes de la fecha límite”.
7. De todas formas, los proyectos siguieron el trámite para ser viabilizados y registrados en el Banco de Proyectos Zomac, para ser financiados con el mecanismo de obras por impuestos en el próximo año gravable (2019).
8. Este año Pensilvania logró viabilizar y registrar en el Banco de las Zomac el proyecto de placas huella para Montebello en el corregimiento de Pueblo Nuevo, el cual cuenta con solicitud de vinculación del impuesto de la empresa Acesco, el contribuyente interesado en este caso.
9. El 17 de mayo del 2019, la ART aprobó el proyecto por 3.965 millones de pesos para las placas huella en Montebello, vereda del corregimiento de Pueblo Nuevo, en Pensilvania.
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