Carlos Castaño fue por años el vocero principal de las Auc. En 1980, después de la muerte de su padre secuestrado por las Farc, Carlos y sus hermanos Vicente y Fidel empezaron su guerra a muerte contra la guerrilla. En los noventa, primero con las Accu y después con las Auc, su proyecto paramilitar setomó todo el país, dejando miles de muertos, de desaparecidos y de desplazados. Cuando las Auc estaban negociando su desmovilización con el gobierno, se opuso a que narcotraficantes adquirieran estatus de jefes de las autodefensas. Estabacada vez más aislado y dos semanas antes de su asesinato ya no estaba en la lista de los voceros de las Auc. Varios jefes ‘paras’ pensaban que Castaño estaba negociando con el gobierno de Estados Unidos el desmonte del narcotráfico para evitar su extradición.
Según se supo después, su hermano Vicente Castaño le ordenó a sus hombres asesinarlo. Un grupo de 30 paramilitares, al mando de Jesús Ignacio Roldán, alias ‘Monoleche’, lo cercaron y lo mataron en la finca Rancho al Hombro, en San Pedro de Urabá, Antioquia. Su cuerpo fue exhumado en la finca Las Tangas e identificado dos años después.
– Lo último que pidió Carlos Castaño antes de ser asesinado
– La maldición de Caín
