‘Otoniel’: capturado el hombre de las tres guerras

Después de cinco años de operaciones militares y policiales fue capturado Dairo Antonio Úsuga David, un hombre que ha vivido la confrontación armada en su máxima expresión durante más de tres décadas.

Se necesitaron algo más de seis años, cerca de tres mil hombres de las Fuerzas Armadas y una gran articulación logística para capturar a quien es considerado uno de los hombres más importantes en la estructura de las llamadas Autodefensas Gaitanistas de Colombia (Agc).

Su captura se produjo en zona rural del municipio de Necoclí, en el Urabá antioqueño, una región que conoce bastante no sólo porque es oriundo de la vecina población de Turbo, sino por su trasiego en la guerra durante más de 30 años.

No era una presa fácil. Para capturarlo, el gobierno del entonces presidente Juan Manuel Santos (2010-2018) lanzó el 2 de febrero de 2015 la Operación Agamenón, una estrategia de las Fuerzas Armadas y de Policía que se concentró en los departamentos de Antioquia y Córdoba.

Poco a poco fueron cayendo sus hombres de confianza, tanto en zonas rurales como urbanas, entre ellos varios de sus familiares, quienes conformaban su estructura financiera y manejaban los recursos que provenían de actividades asociadas al narcotráfico.

Desde el fuerte militar de Tolemaida, el presidente Iván Duque (2018-2022) anunció la captura de alias ‘Otoniel’, cuya operación se denominó Osiris. “Este es el golpe más duro que se le ha propiciado al narcotráfico en este siglo en nuestro país”, dijo el mandatario.

Duque calificó a alias ‘Otoniel’ de “asesino de policías, de soldados, de líderes sociales; además, reclutador de menores”, y lo describió como “un abusador de menores y adolescentes”.

Las Agc se habían convertido en una estructura criminal de gran poder económico y militar, con presencia en los enclaves más importantes de producción y exportación de cocaína, especialmente en el norte del país.

El presidente Duque le agradeció a las Fuerzas Armadas por las labores realizadas para dar con la captura de alias ‘Otoniel’, que contaron con información de inteligencia proveniente de agencias estadounidenses y británicas.

La pregunta que se hacen diversos sectores sociales es qué va a pasar con las Agc. La historia de la guerra en Colombia muestra que ese tipo de estructuras armadas se reciclan para continuar con sus labores criminales, relevando a aquellos mandos que mueren o son capturados.