Gloria Bejarano: en la mira por jugársela por las víctimas del conflicto armado

Esta abogada siempre se inclinó por las labores sociales. Ese interés la llevó a trabajar en la Unidad para las Víctimas (UARIV) con el fin de ayudar a las comunidades afectadas por la guerra en el norte del Tolima. 

Video: UARIV.

Debido a hostigamientos durante las jornadas de atención en la UARIV, abandonó este trabajo y se enfocó en ayudar a víctimas con la radicación de requerimientos legales de manera gratuita.

Después comenzó a ayudar a su padre en su candidatura al Concejo Municipal de Ibagué en 2015. Durante la campaña recibió misteriosas llamadas que buscaban averiguar su vida personal y detallarle sus rutinas.

Ella creció en el seno de un familia de tradición política y carga en su pecho el dolor del asesinato de su tío, Jesús 'Chucho' Bejarano, en 1999, quien era reconocido por ser un experto en temas de negociación de paz.

Ella desconfía de la institucionalidad al ver el procedimiento en el caso del asesinato de su tío, debido a la falta de diligencia para esclarecer su asesinato.

Foto: JEP.

El día de las elecciones locales y regionales, un joven se acercó a ella y le pidió que se retirara del lugar; además, la amenazó de muerte y le dio una hora para ir del sitio. 

Video: Vlada Karpovich.

Para ese entonces, ella había recibido varias llamadas en la que le describían las rutinas de su hijo y le exigían que dejara de realizar las labores sociales que abanderaba. 

Video: Riki Risnandar.

Debido a las llamadas intimidatorias comenzó a sentir paranoia al salir a la calle. Con la amenaza de muerte recibida el día de las elecciones, tomó la decisión de salir de Ibagué junto con su esposo y sus hijos.

Antes de exiliarse, ella y su familia contemplaron la posibilidad de migrar a otra ciudad del país como Manizales, Medellín o Bogotá, pero sintieron que su seguridad seguiría en juego en Colombia.

Finalmente, en enero de 2016, decidieron viajar a Estados Unidos, aprovechando las visas de turistas que tenían vigentes en el momento, y se radicaron en la ciudad de Las Vegas.

Exiliados en Las Vegas, están esperando que las autoridades migratorias les concedan asilo político. Desde que está allí, han trabajado en diversas labores a la espera de que les resuelvan su petición.