Otra de las recomendaciones del encuentro es que una reforma en la política agraria y de tierras debe contener un componente de sostenibilidad ambiental que conjugue una producción amigable con la naturaleza y los recursos. Para las comunidades campesinas, indígenas y afro descendientes, el modelo de desarrollo rural debe basarse en proyectos productivos que no afecten el medio y que protejan ecosistemas que se han visto afectados por la industrialización del campo.


"Las comunidades estamos comprometidas con la protección del medio ambiente, pero las empresas como las de extracción de hidrocarburos y minería han depredado la naturaleza. Es necesaria una reforma agraria que maximice el aprovechamiento de los recursos sin devastar el medio ambiente y que reconozca los territorios indígenas, campesinos y afro descendientes así como su relación con la naturaleza", aseguró el representante de las zonas de reserva campesina.


En las relatorías presentadas por la Onu, también se lanzó una propuesta relacionada con la estrategia antidroga y la erradicación de cultivos ilícitos. Para los asistentes al foro agrario las fumigaciones terminaron afectando a la flora y fauna de varias regiones del país y es necesario buscar formar alternativas para combatir el problema.


Adicionalmente se presentaron propuestas para concertar una política de legalización en la que los pequeños productores de coca y marihuana firmen un convenio con el estado, como ocurre en Perú y Bolivia, y puedan usarse para fines farmacéuticos.