Su primer dueño, Jaime Duque Barrios la vendió al Incora en 1994 por 82 millones de pesos que le pagaron con bonos agrarios. El Instituto la iba a adjudicar a campesinos pero el proceso fue interrumpido con el despojo de los paramilitares, quienes el 4 de agosto de 2003 lograron legalizar a su favor las 22 parcelas en que había sido dividido el predio. Así consta en una resolución del Incora Magdalena. Pero los nuevos adjudicatarios no explotaron las parcelas.
En 2007 los campesinos deciden retornar y luego de un proceso de resistencia se instalan allí de nuevo. A finales de 2010 le solicitan al Incoder que se les formalicen sus tierras, por lo que el Instituto inicia en julio de 2012 un proceso por caducidad administrativa. El objetivo es que Las Planadas vuelva a ser del Incoder. Este proceso terminó el 5 noviembre de 2012 con la aplicación de las caducidades y se inició el trámite de permitirá, por fin, adjudicarles las tierras a los actuales ocupantes.
Según un informe a la Corte Constitucional, entre los adjudicatarios de este predio estaba Omar Alberto Montero, alias 'Codazzi', quien hoy se encuentra prófugo de la justicia y que recibió la finca Tamarindo, de 26 hectáreas.
Para muchos de los habitantes del centro del Magdalena con los que habló VerdadAbierta.com, 'Codazzi' es una amenaza para el proceso de restitución, ya que aseguran que tiene un campamento en la zona, y anda escoltado.